Muchos hoy en día utilizan las insinuaciones, las mentiras descaradas y otras formas de engaño para confundir y dividir a fin de controlar a sus seguidores. Los falsos líderes siempre enfrentan el mismo dilema. No dispuestos a admitir lo que son, deben crear una serie de “mentiras obvias” para cubrir sus acciones ante los ojos de las personas demasiado lejos para conocer la verdad. El encubrimiento incluye tergiversar, negar, ocultar o enturbiar los hechos. Otros participan — y ayudan — buscando la calumnia (Sal. 4:2). Cuando enfrenta esto, ¿qué hace usted? Son pocos los que miran las enseñanzas de un hombre para saber a quién seguir. Esto significa confrontar — y perseguir — toda forma de engaño para derrotarla.

Para que este artículo le ayude, usted debe leerlo completamente. No obstante, si usted lee una gran parte del mismo, podría ser incapaz de detenerse. Al decirse las cosas como son, lo que usted leerá cambiará para siempre su perspectiva de lo que Dios espera.

Un relato de dos líderes

La mayoría en los dispersados viven como si la advertencia del apóstol Pablo para los últimos días acerca de “los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados” (II Tim. 3:13) debiera preocupar a otros, no a ellos mismos. Son otros los que son engañados o están en peligro de ésta, no ellos mismos. ¿Por qué preocuparse por lo que sólo aplica a otros?

He aquí el porqué...

A finales de los 1980s, un autoproclamado apóstol (Joseph Tkach) se levantó y llegó al poder en la Iglesia de Dios Universal. Este nuevo líder prometió que mantendría la verdad y que “seguiría los pasos del Sr. Armstrong”. Sin embargo, él comenzó casi inmediatamente a rebelarse en contra de lo que el Sr. Armstrong enseñó, y a lanzar la verdad fuera de la Iglesia. Afirmaba, “No hay cambios”, pero años más tarde, luego de que la resistencia a las nuevas enseñanzas había disminuido, admitió abiertamente que sí los había, pero que la Iglesia estaba “creciendo en gracia y conocimiento”. Hubo también impactantes revelaciones sobre el carácter personal de este hombre que salieron a la luz. Los ministros séniores — evangelistas — con el Consejo Asesor de Ancianos, vieron lo que estaba sucediendo, pero no se reunieron con la Junta de Directores para despedir a este hombre si no estaba dispuesto a arrepentirse públicamente. Prevaleció la inacción. La corporación finalmente colapsó, y todos los bienes fueron esencialmente robados por un falso líder particularmente débil, trabajando para llevar a cabo su propósito con básicamente sólo cinco subalternos conspiradores. Un gran porcentaje de hermanos y ministros en el campo atestiguaron el proceso, y se lamentaron, “¿Por qué los evangelistas, el Consejo y la Junta fallaron en su deber? ¿Cómo pudieron haber permitido que Joe Tkach y compañía se salieran con la suya desechando la verdad? ¿Cómo pudieron dejarle tomar todo el dinero y los edificios, y cerrar y vender los colegios? ¿Por qué se le permitió destruirlo todo? ¿Por qué no se hizo nada?”

¿El resultado final? Muy pocos buscaron los hechos y la verdad. Casi el 80% de la Iglesia sucumbieron a las mentiras y engaño, y ya sea que siguieron a Joe Tkach o se fueron a casa confundidos. Miles de estos habían dicho: “Esperemos a Dios. ¡Él enderezará las cosas!” Habiendo olvidado II Juan 1:8 — “Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo” — la mayoría de estas personas se “perdieron en la historia”, espiritualmente moribundos donde se sentaron. El 20% restante empezó a seguir a varios líderes de los dispersados en desacuerdo y disputa que enseñaban partes seleccionadas — ¡preferidas! — de la verdad. Poco a poco con los años, algunos de entre el 80% despertaron ante lo sucedido. Pero sólo relativamente pocos.

Aquí un avance rápido de 1993-1998, y como muestra un dispersado. Un evangelista (Roderick Meredith) se levantó y tomó el poder en la Iglesia de Dios Global. Este segundo nuevo líder también prometió que retendría la verdad como la Iglesia “la entendió en enero de 1986”, a la muerte del Sr. Armstrong. No obstante, él empezó casi inmediatamente a enseñar numerosas falsas doctrinas — muchas de ellas grandes. Él afirmaba, “Enseñamos la verdad completa — todo el consejo de Dios”, pero años más tarde, luego que la resistencia a las nuevas enseñanzas había disminuido, aceptó abiertamente tales enseñanzas y aceleró sus cambios, diciendo que la Iglesia estaba “creciendo en gracia y conocimiento”. Una vez más, todo esto sobre impactantes revelaciones acerca de su carácter personal. Y nuevamente, tanto la mayoría en el Consejo de Ancianos como la mayoría de la Junta de Directores claramente lo vieron por lo que era. Pero esta vez, recordando el pasado, ellos intervinieron y le confrontaron varias veces, durante un periodo de más de un año, buscando razonar con él y tratando de que se arrepintiera. Rod Meredith en algún momento prometió a todo el grupo reunido que dejaría cierta conducta y que lo haría “mejor”. Pero la Junta se vio casi inmediatamente forzada a despedirle por no cambiar. Increíblemente, cuando se enfrentan a circunstancias casi idénticas (las diferencias fueron menores), la mayoría en la Iglesia esta vez tomó un enfoque distinto, y se lamentaron, “¿Cómo pudieron tanto el Consejo como la Junta haber hecho esto al Sr. Meredith? ¡La Junta no tenía derecho a despedirlo! El Consejo debió haberle apoyado. ¿Cómo pudieron pensar que podían intervenir y tomar los bienes? ¿Quiénes se creen que son? ¡Esto ha sido una rebelión en contra del líder designado de Dios!”

¿El resultado final? Muy pocos buscaron los hechos y la verdad. Casi el 80% en la Iglesia sucumbieron a mentiras y engaño, y ya sea que siguieron a Rod Meredith o se fueron a casa confundidos. Miles en la IDV hoy dicen, “Esperemos a Dios. ¡Él pondrá las cosas en orden!” Habiendo también olvidado II Juan 1:8 — “Mirad por vosotros mismos...” — muchos de éstos podrían pronto también quedar “perdidos en la historia”, otra vez muriendo espiritualmente donde están sentados. (La evidencia es clara de que algunos ya han muerto.) Una vez más, lentamente a lo largo de los años, algunos de este 80% despertaron ante lo sucedido. Pero esta vez más que unos pocos (con el proceso de aceleración).

¿Por qué tan pocos parecen poder detectar incluso a los engañadores más obvios?

Comparando

¿Cuál era la diferencia entre estos dos hombres? Ciertamente no el resultado final, ni que ambos eran falsos. En el primer caso, las personas se quejaron de la inacción. En el segundo, obtuvieron lo que miles en la Iglesia de Dios Universal dijeron que desearon — y lo que debió haberle sucedido a Rod Meredith. Aún así se quejaron. Al final, sólo los nombres fueron diferentes. Hubo mentiras, engaño y falsas doctrinas por dos altos líderes — uno, un falso apóstol, el otro un falso evangelista. Ambos fueron capaces de controlar el pensamiento de la mayoría con engaños. El segundo caso incluso tuvo a la mayoría en el Consejo y la Junta en acuerdo acerca de qué hacer. No importó. Una carta encubierta “de media noche” escrita por Rod Meredith, llena de mentiras y de una narrativa completamente falsa, fue enviada a los miembros de la Global (propagándose mucho más allá de Global) a pesar de las promesas hechas ante el Consejo completo de no hacer nada “a sus espaldas”. Esto “asesinó” al 80% de la membresía de la Iglesia de Dios Global, quienes “se volcaron” el siguiente sábado a la Iglesia de Dios Viviente (IDV) con poca o ninguna resistencia.

Resumiendo, Rod Meredith se rebeló en contra del gobierno de Dios y muchas de Sus verdades. Él rechazó al Sr. Armstrong como el Elías, así como la forma de gobierno que el Sr. Armstrong enseñó. Abiertamente adoptó (y aún lo hace) la perspectiva protestante (anticristo) sobre lo que es la verdadera Iglesia y Cuerpo de Cristo — que está compuesta de muchas organizaciones, grupos (“ramas”) e individuos dispersos, rechazando así lo que el Sr. Armstrong enseñó y lo que la Biblia enseña acerca de que Cristo dirige una sola organización unificada bajo un solo líder escogido. Él alteró la verdad del evangelio — y muchas otras verdades enseñadas por la Biblia y el Sr. Armstrong. Esto sucedió porque él rechazó primero la gran enseñanza de que la verdad doctrinal sólo entra a la Iglesia de Dios a través de apóstoles. Con el paso del tiempo, Rod Meredith afirmó abiertamente que estaba añadiendo muchas más falsas enseñanzas, incluyendo las más recientes y notorias como que la apostasía de II Tesalonicenses 2:3 es dirigida por el hombre de pecado y que aplica al mundo y no a la Iglesia — y que la cena de bodas será en el cielo.

La lista de enseñanzas heréticas de este falso líder es ahora de varias veintenas.

Por años, desde 1998, Rod Meredith le ha encantado decir, “Dave Pack causó todos los problemas en Global”. En realidad, este hombre sabe que sus doctrinas y su conducta causaron todos sus problemas. Fue la Junta de Directores y no yo, quienes despidieron a Rod Meredith. No se equivoque. Yo estuve completamente de acuerdo con su acción. Pero como miembro del Consejo de Ancianos y no de la Junta, yo no era parte, ni de ninguna manera estuve conectado a su despido, o siquiera consciente de lo que sucedió hasta que todo había pasado. Desde luego, la mayoría nunca tuvieron la oportunidad de saber esto. (El lector interesado puede leer los varios capítulos que cubren los detalles de este periodo en mi biografía de dos volúmenes.)

En aquel entonces, para justificar su conducta, Joe Tkach y Rod Meredith tuvieron que poner un rostro completamente distinto a sus acciones. (David Hulme, Dennis Luker, Clyde Kilough, Jim Franks, Gerald Flurry, y otros como Ron Weinland, han hecho lo mismo, pero cada uno a su manera.) El “rostro” alterado de Meredith ha sido lo suficientemente efectivo como para permitir 14 años de encubrimiento. Un tercio de los ministros en Global se negaron a seguirle. Dos tercios permanecieron con él. Éstos fueron involuntariamente atraídos para estar de acuerdo y trabajar juntos para tergiversar los acontecimientos porque fueron enviados demasiado lejos geográficamente como para conocer los hechos verdaderos. Muchos de estos hombres han abandonado desde entonces a Rod Meredith — o han muerto, frecuentemente de manera horrenda, como fue con Joe Tkach.

¿Cuántos han sido instruidos — y sobrios — con esto?

La única respuesta

Los falsos líderes siempre enfrentan el mismo primer gran desafío. No dispuestos a admitir lo que son o hicieron, deben inventar una serie de “mentiras obvias” para cubrir sus acciones a los ojos de las personas demasiado lejos para conocer los hechos. Estos engañadores parecen conocer lo que por naturaleza Adolfo Hitler sabía cuando famosamente declaró, “Qué suerte para los gobernantes que los hombres no piensen”. Su encubrimiento incluye tergiversar, negar, ocultar o enturbiar completamente los hechos, así como calumniar en público y en privado todas las voces de la verdad — haciendo al denunciante(s) aparecer como perpetrador(es) y el falso líder la víctima.

LAS MENTIRAS OBVIAS juegan el rol más crucial.

La mayor serie de falsedades comprobables y falsas narrativas sobre los eventos en 1998 que Rod Meredith ha continuado a través de los años han sido acerca de mí. Pero como el líder de la Iglesia, tal como lo fue con el Sr. Armstrong, atraigo sobre mi fuego constante — engaño y mentiras poderosas — de un sinnúmero de fuentes en los dispersados y en las astillas de la ex Iglesia de Dios Universal. Son pocos los que se enfocan en las enseñanzas de un hombre para saber qué hacer y a quién seguir. Y a quién no seguir. Esto significa estar dispuestos a enfrentar y “perseguir” el engaño a fin de vencerlo. La mayoría no “prueba los espíritus” (I Juan 4:1) como Dios lo ORDENA porque toma mucho pensamiento y esfuerzo — demasiado estudio y cuidadosa consideración de los hechos y la verdad. También, uno debe saber cómo hacer esto. ¡El presente material se lo mostrará! Por ejemplo, cuando la Iglesia de Dios Unida se separó en 1998, este conocimiento debió haber mostrado a los miembros a no seguir a ninguno de los dos lados. Lo mismo en enero de 2011 cuando la Iglesia de Dios Unida se separó nuevamente y nació la “IDDam”. Ambos lados deberían haber sido rechazados en ambas ocasiones. Algunos pueden ver esto. Otros más lo verán. Muchos nunca lo harán.

Por qué es necesario hacerlo personal ahora

En este artículo seré mucho más abierto sobre muchos hechos personales de mi vida así como falsas acusaciones, al igual que el Sr. Armstrong en alguna ocasión. Trataré rumores antiguos acerca de mi negocio, herencia, supuesta “riqueza”, hogar, oficina, salario, beneficios, cuenta de gastos, enseñanzas, relación con el Sr. Armstrong, el rol de mi primera esposa y su relación con el Sr. Armstrong, la literatura reescrita del Sr. Armstrong, nuestras prácticas de publicidad, las primeras décadas de mi ministerio, y otras cosas.

Muchos hoy día están literalmente atrapados en los dispersados y astillas de la Iglesia de Dios Universal a causa de interminables falsedades sobre mí. Éstas son difundidas por sus líderes y pastores. Abrumados ya por mucho tiempo en el lugar en que se encuentran debido a falsas doctrinas, tradiciones modificadas, políticas laxas, conducta en deterioro, productividad mínima y malos frutos en general, muchos están naturalmente muy infelices. Diariamente escuchamos de ellos.

Capaces de ver los muy distintos frutos de la Iglesia de Dios Restaurada — verdad sin comprometer, una Obra inmensa, una hermosa Sede (y un extenso programa de construcción), una enorme variedad de libros, folletos, artículos y revistas, el Centro Ambassador, un alcance de poderosos medios de comunicación, sitios Web a la vanguardia, televisión nacional, puertas abiertas a líderes mundiales, rápido crecimiento mundial en ministros y miembros, ingreso en explosión, programas para los jóvenes de todas las edades y un énfasis en la calidad en todo — miles se sienten más que intrigados. Trágicamente, flagrantes falsedades acerca de mí personalmente les han impedido a muchos actuar.

Una cita de un famoso novelista aplica en este punto: “Los hechos y la verdad realmente no tienen mucho que ver entre sí”. Esto se debe a que los hechos pueden con frecuencia ser confundidos con “hechos”, que ya no pintan una imagen verdadera. La verdad es la verdad. Este artículo contiene la VERDAD, pero necesariamente también muchos hechos básicos.

Los esfuerzos de Rod Meredith y de otros líderes en mi contra hoy día son análogos y una continuación de lo que Joe Tkach inició cuando él y su equipo hace mucho tiempo empezaron a acusarme falsa y sistemáticamente, y eventualmente me convirtieron en el primer pastor despedido a principios de 1993. Yo sé que la culpa de esto residía a los pies del diablo, y que estos hombres son meramente sus agentes. Mi meta — y esperanza sincera — es ayudar a los verdaderos hermanos — aquéllos guiados por el Espíritu de Dios — a través de las mentiras más grandes y obvias sobre mí. Ellos necesitan los hechos — ¡LA VERDAD! — y he decidido que es mi deber presentarlos. La salvación está en juego. Mientras que muchos tal vez querrían que yo fuese directamente a estos hechos — yo entiendo la naturaleza humana — una breve pero crucial preparación debe ser lo primero.

Dos ejemplos bien conocidos

A finales de diciembre de 2002, el FBI anunció que poseía información creíble que cinco terroristas potenciales habían ingresado a los Estados Unidos cerca de Búfalo, Nueva York, provenientes de Canadá. Fotografías fueron desplegadas de forma prominente. Se revelaron nombres. El resultado fue que la mayoría en los Estados Unidos supieron de ellos. Por al menos una semana, y luego de un intenso esfuerzo por encontrarles, se generó gran preocupación acerca del porqué estos hombres no podían ser localizados.

Pero un desastroso anuncio alteró el drama de esta historia en desarrollo. El “informante” que había pasado el “dato” a las autoridades admitió que todo había sido una farsa. ¡Asombroso! Un solo hombre fue capaz de inventar una mentira tan monstruosa que, literalmente, el MUNDO ENTERO fue notificado sobre las supuestas acciones de estos “cinco sospechosos”. Piense en el tiempo, dinero, energía y preocupación que se invirtieron en investigar esta historia. Yo la creí. Lo más probable es que usted también lo hizo. ¡No obstante, fue una absoluta y DESCARADA MENTIRA!

En otra ocasión, esta vez en julio de 2004, una mujer francesa de 22 años de edad reportó a las autoridades que había sido abordada por una pandilla de seis adolescentes en una estación del tren suburbano en París.

Ella afirmaba que, mientras su bebé de 13 meses de edad observaba, los atacantes, supuestamente árabes o africanos, le cortaron el cabello con cuchillos antes de rasgarle la blusa y dibujar svásticas sobre su abdomen. También reportó que nadie en el tren respondió a sus gritos de auxilio ni acudió a su rescate.

Con el aumento de los crímenes antisemitas en Francia, la nación quedó estupefacta. El Presidente francés Chirac expresó indignación, y también lo hicieron muchos líderes religiosos. (Yo leí sobre esto y quedé horrorizado.) La policía pidió que cualquier persona con información se presentara para ayudar a la investigación. Cualquier hecho que pudiera probar el relato resultó deficiente — no se desarrolló confirmación alguna. A continuación, inconsistencias aparentes surgieron en la historia de la mujer.

Repentinamente, ella admitió algo sorprendente — confesó que lo había inventado todo. ¡Nada de eso era cierto!

No hace falta decir que las repercusiones de esto igualaron la indignación inicial. ¿Cómo pudo ella hacer esto? y ¿Por qué? ¿Qué la motivó? La respuesta: Ella simplemente deseaba atención y mayor apoyo de sus padres y novio. ¡Nuevamente, asombroso!

Esta fue otra mentira completamente descarada, publicada en todo el mundo por fuentes noticiosas respetables, que parecía tan creíble, tan verosímil, ¡tan VERDADERA!

¿Puede usted aprender algo de tales incidentes? ¿Le ha puesto sobrio el poder de las mentiras? Si usted oyó de estas historias en su momento, ¿le causó sorpresa que las personas pudieran “inventarlo todo” — y que tantos pudieran ser engañados? ¿Reconoce usted que las historias pueden sonar perfectamente creíbles — y sin embargo ser PURA FICCIÓN? Joe Tkach, Rod Meredith y otros hoy día han entendido por mucho tiempo el tremendo poder de esas historias inventadas.

Una táctica común usada con frecuencia en el mundo de los negocios funciona así: Si el dueño de un negocio quiere hacer quebrar a un competidor, simplemente inicia el rumor de que su competidor está teniendo “problemas financieros”. El objetivo es hacer de esto una profecía que se cumplirá por sí misma — y esto es con frecuencia exactamente lo que sucede. Los clientes o potenciales clientes comienzan a retirarse del negocio con la víctima en la mira, pensando que podrían “salir lastimados” si la víctima cierra inesperadamente. Entonces, si la víctima quiebra, irónicamente, ¡la credibilidad del mentiroso y calumniador que puso en marcha la cadena de eventos resulta de hecho acrecentada! Al final, el mentiroso puede aparecer como una fuente de autoridad en el asunto. En realidad, hemos descrito a una persona malvada y manipuladora — alguien que al menos temporalmente parece tener éxito puesto que los eventos y la verdad aún no le han alcanzado.

Con los líderes religiosos falsos, esto a veces significa esperar por Dios para que traiga la justicia definitiva a un hombre. ¡Esto también significa que aquéllos con el Espíritu de Dios que están siguiendo a esos hombres deben rechazarles! El “Espíritu de Cristo” en ellos (Rom. 8:9) les “guiará” (vs. 14) a Su verdad y hacia Su única Iglesia (Juan 10:3-5; Apo. 3:18). Si ellos ignoran la voz de Cristo, perderán el Espíritu Santo (I Tes. 5:19; Heb. 6:4-6). ¡Hebreos 10:26-27 describe su destino!

Dos tipos de mentirosos

Hay dos tipos de personas que mienten — ¡y usted debe ver la diferencia! Esto significa enfrentar duras realidades, difíciles de aceptar.

Primero existen los que mienten a causa del pánico o el miedo, generalmente sin previo aviso. Tomados por sorpresa en algún asunto, muchos (casi toda las personas) buscarán cubrirse con una clase de falsedad fácilmente predecible. (Por supuesto, el cristiano trata de nunca hacer esto y se arrepiente cuando lo hace.) Este tipo de mentira surge mayormente de la autopreservación. El infractor puede sentirse amenazado si dice la verdad, así que se protege a sí mismo a través de una mentira “de decisión repentina”. Tales falsedades son fáciles de entender y perdonar.

Aunque están mal — ¡pecado es pecado! — esto podría equipararse a un ladrón que roba para alimentar a sus hijos, contrario o debido a la codicia. Dios hizo una diferenciación en el Antiguo Testamento entre ladrones, y el castigo para el último (un reembolso, más el 100%) es cinco veces mayor que para el primero (un reembolso, más el 20%).

Pero hay un segundo tipo de mentiroso — y son muy distintos del primero. Hay quienes por malicia inventan mentiras asesinas con el único fin de perjudicar a inocentes. Su meta es infligir el mayor daño en contra de una o más personas específicas, o en contra de una organización o institución, tal vez un ex empleador. Estos no son meramente aquéllos que dijeron una mentira — algo que alguna vez hicieron — estos son mentirosos. En otras palabras, esto es algo que estas personas SON, no sólo algo que hicieron. Aunque es incorrecto, una persona no se convierte en ladrón o adúltero después de un solo acto. Una vez que se establece un patrón, esto se convierte en lo que la persona ES, no meramente algo que él o ella hicieron. El acto repetido ha definido su carácter.

Los que siguen el segundo patrón de mentir abiertamente revelan quién es su “padre” (Juan 8:44) — estos son MENTIROSOS homicidas, mentes dentro de las cuales su padre espiritual, Satanás, puede inspirar lo que quiera que digan.

Presentemos momentáneamente otra faceta de este tipo de mentiroso. Salmos 81:15 habla acerca de ellos cuando dice, “Los que aborrecen al Eterno se le habrían sometido”. Este versículo revela que hay personas que simplemente aborrecen a Dios. Es el mensaje claro del versículo. ¡Mantenga esto en su mente antes de continuar! Acéptelo por lo que es. Así como con los mentirosos malévolos, es igualmente difícil para algunos creer que podría de hecho haber seres humanos que aborrecen a Dios, pero los hay.

¿Cómo es que esas personas son culpables de este odio? ¿Cómo se demuestra esto? Entendamos.

En primer lugar, están los que se introducen en la Iglesia, ¡pero odian la Ley de Dios y su autoridad sobre ellos! Estos son una gran parte de las “cizañas entre el trigo”. Note que el versículo dice que estas personas no se “someterán a” Dios. Entonces estas son personas que odian el gobierno de Dios sobre ellos. Desde luego, ese gobierno — el GOBIERNO DE DIOS — se encuentra sólo en Su Iglesia, la única guiada por Jesucristo. Obviamente, Satanás odia el gobierno de Dios y sabe que pronto será desterrado de la tierra — y reemplazado por aquéllos en la Iglesia de Dios hoy.

La mayoría de los políticos son mentirosos fríos y calculadores. Para ellos es rutina. Dirán cualquier cosa para perjudicar a sus oponentes y ganar ventaja política. ¿Quién duda que el diablo hará cualquier cosa en su poder para vencer a sus “oponentes políticos”, como él vería al pueblo de Dios? Lo que él haría para descarrilar a la Iglesia de Dios no tiene límites.

Volvamos a las dos tipos de mentirosos.

La mayoría puede creer fácilmente que el primer tipo de persona descrito existe porque “todos” hemos probablemente dicho mentiras “repentinas”, tal vez más de una vez. Pero el segundo tipo presenta un problema para aquéllos que no han hecho, ni harían nunca, tales cosas. Ellos simplemente no pueden comprender — no pueden sondear — a los que si lo harían. Ellos no pueden entender que hay seres humanos en el planeta tierra que mentirían directamente basados en malicia pura y con la intención de causar daño. Piense en ello de esta manera — comprender esa maldad no es posible para el mentiroso “promedio”.

Entendamos. Ciertos individuos con odio homicida hacia el Señor han sido enviados por el dios de este mundo para asolar con mentiras al pueblo de Cristo en los “últimos días”.

¡Lea II Tim. 3:1, 3 y 13! Sin duda, Satanás reserva sus peores y más capaces mentirosos para el “servicio” en contra de la verdadera Iglesia y la Obra de Dios. Él necesita mentirosos lo suficientemente buenos para “tener éxito”, y al final de la era Dios nos dice que él los tiene.

Ahora, siendo el padre del homicidio y las mentiras, si Satanás fuese a usar a sus mejores agentes — entre el “trigo” — para inventar falsedades en contra de alguien, ¿quién sería su objetivo más obvio? ¿A quién querría dañar más? ¿A quién querría desacreditar más? ¿De quién querría apartar más a las personas de seguirle?

Si usted puede entender la respuesta a esto, puede entonces ver por qué los líderes y siervos de Dios dirigiendo a través de las eras han sido calumniados más allá de los límites normales.

Ciertamente Satanás quiere dañar a todo el pueblo de Dios. Todos los que tienen el Espíritu de Dios — los engendrados por un Padre diferente — son sus enemigos. Pero aquéllos que son líderes dentro de la Iglesia de Dios reciben atención especial. La historia lo demuestra.

Si usted lee mi libro “El Gobierno de Dios – Entendiendo los oficios y deberes”, verá con otros ojos porqué Satanás debe atacar a los siervos de Dios — especialmente a Su siervo líder — más allá de todo límite. Este libro no es lo que su título podría sugerir. Lejos de ser tedioso, los lectores lo describen como revelador, fascinante e inspirador. Pero más que nada es llamado instructivo, mientras que al mismo tiempo atrae al lector — haciendo difícil dejarlo.

Por encima de todo en la agenda del diablo está destruir a la Iglesia de Dios y el gobierno, y hacerlo cueste lo que cueste. Él cree que si puede destruir la reputación o la credibilidad del líder a través de mentiras, habrá debilitado exitosamente al gobierno de Dios en Su Iglesia, y el resultado es que él podría al menos limitar o incluso acabar con la Obra de Dios. Después de todo, es el gobierno de Dios lo que da a la Iglesia de Dios la habilidad de permanecer junta, trabajando en unidad para cumplir sus dos propósitos — ¡alimentar al rebaño y completar la Obra de Dios!

El libro El Gobierno de Dios también da una extensa mirada al gobierno dentro de los dispersados y astillas. Este le llevará a un viaje desde los 1950s hasta los 1980s, hasta el deceso del Sr. Armstrong, y compara como los mejores agentes de Satanás destruyeron por un tiempo la habilidad del gobierno de Dios para continuar produciendo los maravillosos frutos y crecimiento que la Iglesia y la Obra alguna vez disfrutaron. Luego le traerá — conectando eventos — al presente.

Vuelva a leer esta última sección hasta que suene en sus oídos. ¡Entonces lea el libro!

Alrededor del Sr. Armstrong

Siempre — siempre — hubo lobos con piel de oveja alrededor de Herbert W. Armstrong. ¿Duda usted de esto? Sólo recuerde lo que él reportó en su autobiografía sobre cuán a menudo líderes y otros le dieron una puñalada por la espalda y le traicionaron durante todos sus años en Oregón. Este patrón nunca terminó en realidad conforme pasaron los siguientes 40 años. ¿Ha olvidado cuántos ministros de rango y administradores apostataron completamente después de su muerte? ¿Ha notado cómo muchos otros ministros una vez de rango y administradores, han comprometido seriamente sus enseñanzas desde su muerte? Obviamente, esto también ha sido cierto de muchos miles de ex miembros de la Iglesia de Dios Universal.

Pero hay una diferencia principal entre los tiempos del Sr. Armstrong y la actualidad. Aquellas personas, y por supuesto los “miembros” locales, no podían llevar sus historias a Internet. Cuando mucho podían envenenar sólo a unos cuantos a su alrededor que fuesen lo suficientemente ingenuos como para escuchar sus invenciones distorsionadas y llenas de ira (Rom. 1:30).

¡Entienda esto! Muchos de estos mismos líderes hoy, incluyendo muchos ministros y miembros en los dispersados, guardan un odio — un desprecio absoluto — por el Sr. Armstrong y su autoridad, y esto es casi palpable. (Nosotros vemos sus correos electrónicos dando su afiliación.) Por lo general aunque, ellos no dicen que lo odian. (Pero algunos si lo hacen.) Después de todo, incluso los apóstatas profesaron amar al Sr. Armstrong. Pero sus frutos dicen algo muy diferente. Incluso aquéllos que dicen respetar genuinamente al Sr. Armstrong son más que capaces de fabricar historias o distorsionar la verdad de lo sucedido.

Con respecto a doctrina, el Sr. Armstrong podría detectar a un liberal a un kilómetro de distancia. Cuando alguien estaba buscando diluir la doctrina, él lo sabía inmediatamente. También yo puedo. Pero, identificar doctrinas falsas y un hereje es muy diferente — y mucho más fácil — que identificar a los testigos falsos. Por ejemplo, si un grupo de líderes llegan a un acuerdo, y le dicen que el día de reposo es el martes, usted reconocería de inmediato la falsedad de sus palabras. Por otro lado, si el mismo grupo alega mala conducta personal en contra de un ministro — incluso alguien que no comprometería la verdad, y que está haciendo la Obra de Dios — ¡las personas repentinamente se confunden y están dispuestas a creer su reporte!

¿Por qué? — ¡Especialmente cuando Dios explícitamente le dice a Su pueblo que no lo haga!

En este punto, algunos podrían protestar que “En boca de dos o de tres testigos conste toda palabra”. Aún así, estas personas olvidan que miles hablaron falsedades en contra del Sr. Armstrong. Pero eso no las hizo verdades. Qué triste es que tantos ya no puedan, espiritualmente hablando, sumar dos más dos y obtener cuatro. La pregunta que debe de ser hecha siempre es: ¿Qué enseñó el Sr. Armstrong?

La Iglesia de Dios Restaurada y yo hemos sido constante blanco de acusaciones increíblemente falsas. Mentirosos destructivos y divisivos han buscado repetidamente destruirnos. E intentarán de nuevo — una y otra vez — hacer esto. Usted debe estar consciente de esas personas. Aunque tal vez el peor, Rod Meredith sea sólo uno de ellos.

¿Pero qué es lo que yo enseño?

Desde el principio, tuvimos numerosas cizañas (exactamente como sucedió en la Iglesia de Dios Universal) entrando al rebaño. Después de convertirse en amigos y ser familiares, se quitaron la ropa de oveja y procedieron a mentir, confundir, dividir y atacar. Fueron tan diabólicos como los describen las advertencias de Cristo en el Nuevo Testamento. Podría contar historias verdaderas sobre ex “privilegiados” que son tan sorprendentes — ¡tan INDIGNANTES! — que sería casi imposible de creer que alguien pudiera ser capaz de tal conducta. Irónicamente, estas mismas personas cubrieron su propia conducta atroz inventando historias sobre mí. Esto es lo que Rod Meredith hizo. (Y muchos no consideraron sus enseñanzas — o las mías en contraste.)

Una mentira poderosa

Permítame iniciar con un ejemplo de lo que pudiera ser llamado una mentira poderosa — una mentira obvia. Un ex empleado dijo de mí aproximadamente en 2002, y cito sus palabras, que yo “ganaba 125.000 dólares al año (libres de impuestos), que tenía una enorme cuenta de gastos, que vivía en una mansión y contaba con una oficina suntuosa — todo esto pagado por casi 200 hermanos. “Esto recibió amplia circulación — y tal vez aún lo hace — habiendo iniciado antes sus ataques con peores acusaciones a finales de 2000, cuando salió de la Iglesia. Mientras que cada elemento en esta declaración es ficción pura, algunos fueron lo suficientemente tontos como para creer tan atroz reporte. Pero esto ha sido sólo posible porque, en primer lugar, estas personas acudieron a la cloaca del Internet en donde acusaciones absurdas son publicadas rutinariamente. (Desde luego, el Internet ha sido como el árbol del conocimiento del bien y el mal. No todo allí es malo. Éste contiene mucho conocimiento beneficioso — pero también mucho que es maldad pura.)

Pregúntese: ¿Se alejaría de una oportunidad de reunirse con la única verdadera Iglesia de Dios, que enseña la verdad completa y hace la verdadera Obra de Dios — todo bajo la forma correcta de gobierno — a causa de las murmuraciones obtenidas de mentirosos y calumniadores que luego son difundidas a través de Internet? ¿O en lugar de eso va a examinar los frutos verdaderos? — la enorme cantidad de lo que producimos y enseñamos, y las vidas que están siendo cambiadas.

Sepa que comprendo que las cosas que se dicen sobre mi palidecen cuando se comparan con las cosas horribles dichas sobre el Sr. Armstrong durante y después de su vida. ¿Caería usted en la tentación de navegar por Internet para buscar estas historias — o creerlas, si ya lo ha hecho? (Por supuesto, algunos lo harían y lo hacen.)

¿Piensa que Dios quiere que sus siervos hagan esto? ¿Piensa que Él lo “pasa por alto” (Hechos 17:30) cuando lo hacen?

Piense en cuántas cosas un Cristo perfecto y sin pecado fue acusado por personas que deben haber parecido FUENTES CREÍBLES en esos tiempos. Considere una vez más: Él fue marcado como un blasfemo, borracho, traidor, bastardo, hereje, poseído por demonios, iracundo y abusivo (cuando volcó las mesas de los cambistas en el templo), quebrantador del sábado, ignorante, amigo de publicanos y pecadores, y más. ¡No obstante, Él enseñó sólo la verdad — y era Dios!

Desde luego, el Internet no existía en el primer siglo. Tal vez la mayoría de las personas de esos tiempos nunca escucharon esas acusaciones, dichas por falsos testigos con motivos personales. Yo pregunto: Si usted hubiese escuchado de estas cosas hace 2.000 años, ¿habría creído que Jesús estaba calificado para ser su Salvador? ¿Habría usted reconocido que Él era el Hijo de Dios? ¿Le habría usted seguido?

Por supuesto, ¡ninguna de estas acusaciones en contra de Cristo era cierta! Sin embargo, Dios permitió que fueran registradas para TODOS LOS TIEMPOS en la Escritura para que nosotros pudiéramos saber que incluso el inocente Jesucristo — ¡un Ser Divino y eterno! — pudo ser acusado de cosas más horribles y numerosas de las que alguien puede imaginar. Piense en cuántos de la era del Nuevo Testamento en la Segunda Resurrección desearán haberse enfocado únicamente en las maravillosas enseñanzas de Jesús — ¡en la verdad!

Considere esto. ¡Su corona podría depender de su comprensión!

“Falsedades insidiosas” acerca del Sr. Armstrong

Algunos hechos históricos serían de utilidad antes de mirar más de cerca mis registros. El Sr. Armstrong era también, y con frecuencia, acusado de “hacer las cosas por dinero”. Y se encontró con la necesidad de hablar abierta y periódicamente en los primeros años a la membresía y colaboradores sobre sus propias contribuciones financieras a la Obra. También hizo esto de manera general posteriormente para que otras personas pudieran entender POR QUÉ él podía hablar con tal convicción ante los hermanos y colaboradores sobre la necesidad de sacrificar verdaderamente, y de manera regular, por la importantísima Obra de Dios.

En 1972, el Sr. Armstrong decidió que la Iglesia debía conocer cierta información acerca de su líder. Lo que escribió sirvió para neutralizar lo que él llamaba las “falsedades insidiosas de sus acusadores”:

“Mi esposa y yo vivimos en verdadera pobreza por 28 años, buscando que la Obra se desarrollara para llegar a ser la poderosa Obra mundial que hoy es. Y no sólo eso; he sido a través de los años el mayor colaborador financiero de la Obra. Solamente estoy diciendo esto para que ustedes sepan que no les estoy pidiendo que hagan algo que yo no he hecho — no obstante las insidiosas falsedades de los acusadores...”

Carta a los Hermanos, 31 de mayo de 1972

Usted podría estar sorprendido de que el Sr. Armstrong fuera tan franco con la Iglesia sobre sus contribuciones personales. Yo lo estuve cuando leí por primera vez lo que describió. Aún así, en los primeros años, el Sr. y la Sra. Armstrong tuvieron que dar algunas veces más allá de todo límite. Su sacrificio financiero era asombroso, y particularmente cuando él fue más tarde acusado con tanta frecuencia de tener un motivo financiero personal o egoísta. Créame, puedo contarlo.

He aquí tan sólo una declaración más de su Autobiografía (también incluida en nuestra biografía de la vida del Sr. Armstrong) para mostrar más allá de cualquier duda en dónde estaba su corazón, incluso desde los tan difíciles primeros años de la Obra. Quedé sorprendido ante lo que él estaba haciendo detrás del escenario de la Obra (el énfasis es suyo):

“El 2 de abril de 1940, tuve que escribir a los colaboradores: ‘La única manera en la que he logrado mantener la obra en marcha ha sido con mi sacrificio personal — tomando dinero del gasto familiar, permitiendo que mi familia sufra. Una de mis hijas ha tenido que dejar la escuela. Estamos a punto de perder nuestra casa. Hemos prescindido de vestimenta muy necesaria. Podría decirles más, pero no quiero hablar sobre nosotros mismos — nuestro Padre celestial lo sabe. Estamos dispuestos y felices de hacer cualquier sacrificio. PERO EL PUNTO ES, HEMOS LLEGADO AL FINAL, A MENOS QUE UNA AYUDA SUSTANCIAL VENGA Y PRONTO. La obra no se puede ver entorpecida por este método de sacrificio personal por más tiempo. En tanto que fuéramos únicamente nosotros quienes sufriéramos, yo no diría nada. Pero ahora la OBRA del Señor se detendrá a menos que una ayuda sustancial venga pronto. Por el bien de la obra debo recurrir a nuestros colaboradores. Yo moriría de hambre antes de pedir un solo centavo de caridad para mí mismo. Pero estoy dispuesto a humillarme de cualquier forma por causa del evangelio’”.

Vol. 2, Cap. 40, pp. 8-9

Probablemente pocos recuerdan o alguna vez supieron que el Sr. Armstrong murió virtualmente sin posesiones materiales que pudiera clamar como suyas, además de una cantidad de trajes, un reloj y otras pocas simples pertenencias, incluyendo casi nada de valor. El patrón de increíble sacrificio de este hombre durante prácticamente toda una vida fue evidente para todos quienes le conocieron. Por lo tanto, no debiera sorprendernos cuán pocas posesiones él tenía al final de su vida. ¡NUNCA nada fue más importante para el Sr. Armstrong que la Obra de Dios! No obstante, sus motivos fueron continuamente cuestionados, y por aquéllos que no tenían posibilidad de entenderlos.

Pero yo entiendo. Mis hijos también sufrieron carencias por años, con respecto a la ropa por ejemplo, mayormente vistiendo cosas usadas de sus primos porque yo estaba siendo sistemáticamente mal pagado por Joe Tkach durante todos sus años en desarrollo. La necesidad de ropa — de ellos o de sus padres — es sólo la punta de este iceberg.

Siguiendo el ejemplo del Sr. Armstrong

Esto nos lleva a historias y falsedades sobre mí. En el espíritu de la honestidad del Sr. Armstrong, llegué a la conclusión de que los hermanos en conjunto debían saber cosas similares acerca del líder de la Iglesia de Dios hoy. Si el Sr. Armstrong pudo ser tan abierto por el propósito por el cual lo fue, ¡entonces yo también puedo serlo por la misma razón!

He aquí entonces algunos hechos con respecto a mis finanzas personales en apoyo a la Obra de Dios.

A finales de 2007 di dos sermones, el segundo se tituló “Un llamado a la acción — ¡El Tiempo es Ahora!”, en parte para decirle a la Iglesia con cierto detalle la historia de lo que mi difunda esposa y yo habíamos estado haciendo de manera privada — y por qué. (Los detractores se aseguran de nunca mencionar la crucial Parte 1 de la serie, que prepara lo que muchos adoran citar deliberadamente fuera de contexto — y de manera imprecisa, además, para lograr máximo impacto — de la Parte 2.) Entendamos. Mi esposa y yo hicimos lo que ahora usted va a leer ¡porque los primeros años de la Obra lo demandaron (y esto ha resultado ser permanente)! — tal como las circunstancias requirieron lo mismo del Sr. y la Sra. Armstrong a través de los años cuando él dirigía la Obra de Dios. Realmente no tuvimos opción, así que no busco obtener “crédito” como tal.

La totalidad de los ahorros de nuestra vida (míos y de mi difunta esposa) y prácticamente cada dólar extra que quedaba en nuestro presupuesto mes con mes por años fue a esta Obra, incluso hasta el punto de obtener préstamos hipotecarios (en múltiples ocasiones) para dar más, cuando era necesario, porque nuestra casa continuó aumentando de valor hasta 2007. Varias veces, el Sr. Armstrong tuvo que solicitarles a los hermanos que pidieran prestado para la Obra (cuando la necesidad era urgente). Yo no he hecho esto. Sentí que necesitaba darle a la Obra primero yo mismo (no prestado) todo el tiempo antes de pedirle a alguien más que sacrificara de manera similar. (Incidentalmente, el mentiroso mencionado antes, que había trabajado en nuestra Sede, estaba plenamente consciente de este patrón de dar cuando inventó sus falsedades.)

Y todo esto además de no recibir ninguna de las siguientes cosas: beneficios médicos, seguro de vida, un auto, una cuenta de gastos incluso de forma regular, no digamos libre, o algo cercano a una asignación anual de segundo diezmo, concedida históricamente a todos los ministros de tiempo completo. No he recibido bono alguno o cualquiera de las otras cosas que virtualmente todos los pastores de campo normales recibieron en el pasado, o que aquéllos en los dispersados aún reciben (quienes ahora sólo tienen que trabajar un número relativamente reducido de horas a la semana teniendo bajo su cuidado pequeños grupos de personas) — y yo soy el líder de la Iglesia de Dios Restaurada. Además, mi salario fue durante mucho tiempo MUY por debajo de lo que todos los líderes en los dispersados se les pagan. ¡Lo sé! No tengo seguro de vida ni seguro social esperando entre bastidores, y me queda muy poca liquidez sobre el valor de mi casa (si es que algo) — y no estoy ya en mis veintes o treintas (ni siquiera en mis cincuentas), con muchos años para “ahorrar para (un supuesto) retiro”. Francamente, siguiendo el ejemplo del Sr. Armstrong, planeo “retirarme” directamente al reino de Dios o mediante la muerte (dormir en Cristo) en la resurrección, lo que sea que venga primero.

Lo que se ha dicho sobre mi mensaje de “Un llamado a la acción” acerca de dar a la Obra de Dios fue, al menos en parte, correcto. Sin embargo, después di otros cuatro sermones extensos probando que esta práctica es bíblica. (Nadie puede discutir que la Iglesia del primer siglo tenía “en común todas las cosas” — Hechos 2:44-45; 4:32-5:11.) Pero muchos no aceptan la Palabra de Dios. No obstante, nuestro ministerio entero y la membresía vieron el resultado de las escrituras simples involucradas por lo que eran. Pocos o ninguno de los miles con nosotros han salido de la Iglesia por esto porque la explicación fue completamente clara.

Este breve resumen de casi ocho horas de sermones podría no cambiar la mente del lector. Pero no podemos pedir disculpas por lo que nuestro ministerio entero entiende como absolutamente bíblico, y por lo que hoy está ayudando a explotar el crecimiento de la Iglesia de Dios.

¿Una gran herencia?

Otros hechos necesitan ser aclarados. Muchas falsedades han sido difundidas sobre mi primera esposa, la supuesta “riqueza” de mi padre, mi herencia, el proceso de reescribir la literatura del Sr. Armstrong, y sobre si enseño doctrinas diferentes a las que él enseñó, así como mi relación con el Sr. Armstrong. Han habido otras acusaciones que no son dignas de comentar. El punto principal es que he estado bajo feroz ataque, desde todos los frentes, con mentiras casi inacabables — completas, absolutas invenciones — dichas sobre mí. (Y esto sigue — como fue con el Sr. Armstrong por toda una vida.)

Ahora, para los hechos más escuetos con respecto a lo que heredé de mi padre después de su muerte en octubre de 1995. Yo nunca he escrito al respecto y hasta recientemente fue que le dije a alguien sobre esto.

Primero, recibí una pequeña tienda (alrededor de 139 m² de espacio comercial) — no dos o muchas tiendas, como algunos han afirmado, y ciertamente no de las que generan algún tipo de “riqueza”. Todo lo contrario. Fue Rod Meredith quien inició la mentira de que “Dave Pack es millonario” y a esta historia le crecieron piernas. Escogí nunca prestar atención a su engaño, creyendo que Dios sabía la verdad. Pero al final, muchos han resultado afectados por su mentira.

Yo virtualmente regalé la tienda que recibí a mi hijo en julio de 2000. Es la única tienda hoy día, y mis dos hijos aún trabajan ahí. No ha habido beneficio para mí por muchos años, y muy poco antes del 2000. Mi padre NO era rico ni nada cercano a eso. Yo ni siquiera supe lo que tenía sino hasta después de su muerte. El valor total de su propiedad estaba por debajo de los 600.000 del límite federal de impuestos en vigor en 1995 cuando él murió. (Y sus “bienes” pasaron por una auditoría federal.) Esa cantidad fue dividida en 10 ¡(tres hijos, siete nietos)! A mí me tocó la única tienda de mis padres.

Se ha dicho que “heredé una gran suma de dinero” de mi padre. Eso es una completa falsedad. Esto ha sido parcialmente el resultado de la mentira de Rod Meredith. Yo no recibí ni un décimo — ¡ni un centavo! — en efectivo. La tienda produjo algo de dinero desde abril de 1997 — 18 meses — hasta que empecé a preparar la apertura de una segunda tienda en enero de 1998 — a la cual nunca le fue bien y prácticamente acabó con mi “ingreso extra” desde mayo de 1997 en adelante, hace 15 años ya. Dese cuenta que tomó dos años y medio (hasta enero de 2010) antes de siquiera empezar a pagar los gastos funerarios de mi esposa. Estos fondos vinieron de una muy modesta herencia después de la muerte de mi tío en la primavera de 2009.

Una obra en fe

Algunos claman que el inicio de la Iglesia de Dios Restaurada no fue realizado “en fe, como lo hizo el Sr. Armstrong” puesto que yo era “rico” o “millonario”, y que usé mis millones para iniciar y mantener la Iglesia. Primero, si esto fuese cierto, ¿por qué los críticos denigrarían lo que sería algo increíblemente generoso? ¿Por qué esto figuraría entre una lista de supuestas cosas negativas sobre mi persona? Yo hubiese deseado haberme hecho millonario y poder haber dado millones a la Iglesia. Pero nada por el estilo sucedió siquiera.

Más de historia en breve. En marzo de 1993, cuando fui el primer pastor que Joe Tkach despidió y marcó públicamente en video (el 6 de marzo desde Tampa, Florida), tuve que actuar únicamente en fe. Nuevamente, había estado siendo sistemáticamente mal pagado por gran parte de mi ministerio por un vengativo Joe Tkach quien me odiaba mayormente por mi relación con el Sr. Armstrong. Yo no tenía dinero en el banco — nada — cuando Dean Blackwell vino desde Pasadena (sollozando a la puerta principal de mi casa y llevando flores) acompañado de un pastor de los alrededores para llevarse mi carro, mi computadora y los archivos de la Iglesia. El resultado: mi esposa y yo nos quedamos sin un segundo auto para al menos ir a comprar víveres. Tuvimos que caminar. Dos semanas de indemnización por despido (más unos pocos días de vacaciones) tuvieron que durar varias semanas hasta que pude ser pagado por Global.

He aquí cómo obtuve un auto de la Iglesia de Dios Global en marzo de 1993: Tomé un adelanto en efectivo (la cantidad máxima, al límite) en mi única tarjeta de crédito en ese entonces por 4.000 dólares y lo envié a Rod Meredith para que Global pudiera comprar un auto a su nombre con mi dinero — con la esperanza de que pudieran pagarme en el futuro, ¡¿¡¿en algún momento?!?! (Por supuesto, después de un tiempo lo hicieron.) Estaba feliz de hacerlo pues esto ayudaría a una diminuta organización que tenía apenas ocho semanas de edad a establecerse mejor. Esto es diametralmente distinto a la forma en la que la Iglesia de Dios Unida (o IDDam más tarde) comenzó en masa, y donde no se necesitó fe pues miles de hermanos y cientos de ministros se movieron juntos, y la mayoría contaban con sustanciosos cheques por indemnización en la mano de la Iglesia de Dios Universal. Por cierto, a ningún otro ministro en Global o en la Iglesia de Dios Viviente se le pidió o necesito hacer lo que yo hice.

Casi no tengo dinero en el banco hoy día. Algunos piensan que soy rico porque nunca expliqué nada de esto cuando pagué una cena en presencia de ellos con el poco extra que tuve por un tiempo. Probablemente en algún momento hice un deservicio a algunos por no haber explicado esto en presencia de los que lo vieron.

Yo le dije a Rod Meredith — llanamente — que no era rico, pero él no lo creyó porque al principio di a Global un poco de dinero extra de los escasos ingresos de la tienda en sus inicios. El 1 de noviembre de 1995, tres días después de que mi padre había fallecido, él alargó la mano para tomar mi cartera sobre la mesa en un restaurante (para sacar y literalmente contar mis, para entonces, varias tarjetas de crédito), preguntando bruscamente (como lo hizo varias veces posteriormente), “Dave, ¿eres millonario?” Él deseaba aportaciones de mi parte — ¡y lo dijo así reiteradamente! — pero no había nada para dar. En una ocasión, casi un año más tarde, él de hecho se enfureció conmigo frente a cinco personas en un restaurante ¡porque me ofrecí a pagar la cuenta! Él dijo, “Queremos que hagas donaciones generosas, no que pagues la comida”. Tal era el hombre. ¡Desde luego él negará estas historias por la misma razón que inventó las otras sobre mí! Pero todo esto sucedió.

Me he visto forzado a tener más fe con respecto al dinero durante toda mi vida adulta que en cualquier otra área en donde se requiere fe. Es casi cómico que la gente piense que “tengo dinero”. Posiblemente ahora tengo una “liquidez negativa” con mi casa. Rento un auto. Usé los mismos dos pares de zapatos desde 1993 hasta 2006 porque no podía aportar para unos nuevos. Nuevamente, nunca he solicitado o recibido prestación alguna de la Iglesia de Dios Restaurada — ¡en lo absoluto! La Junta de Directores me ha pedido que las tome, pero han respetado mis más de 13 años de no hacerlo. En ciertas ocasiones que tuve cierto dinero extra en nuestros primeros años, el lector puede adivinar a dónde fue enviado.

Nunca es suficiente

Podría hacer la pregunta en este punto: ¿Necesitaba usted saber estos hechos sobre mis finanzas? Y entonces, debido a las “insidiosas falsedades” de mis “acusadores”, existe la pregunta de si lo que he escrito tendrá credibilidad. ¿Lo he “inventado” todo para desviar el criticismo o ganar simpatías? (Dese cuenta que habría mucho más por agregar si este fuese mi motivo.) Pero dado que esta preocupación no detuvo al Sr. Armstrong de reportar a la Iglesia los hechos sobre sus contribuciones, tampoco me debe detener a mí de reportar la misma cosa al Pueblo de Dios en general.

Para aquéllos que dudan aún luego de esta explicación, yo podría preguntarles: ¿Debo acaso publicar una foto de mi casa para que las personas acepten lo ridículo de las acusaciones discutidas previamente? ¿Deben acaso ver mis declaraciones de impuestos de varios años para saber que mi salario estaba mucho — MUCHO — por debajo que la cantidad mencionada antes, así como lo diminuto de mis reportes de gastos, incluso como el líder de la Iglesia de Dios? ¿Debiera ese reporte venir certificado por contadores y abogados para que los lectores lo creyeran? Y aún así, ¿algunos aún no creerían los hechos, dado que estas personas están dispuestas a primero buscar los reportes de mentirosos, murmuradores, chismosos y falsos testigos?

Ahora piense sobre todo lo que se ha dicho y escrito sobre mí. Si todo fuera verdad, yo tendría que lograr que nuestro personal, ministerio de campo y miles de hermanos que defendieron la verdad estuviesen todos de acuerdo falsamente — para conspirar y mentir conmigo — sobre los hechos en este artículo. (De hecho, la mayoría de los ministros en la Sede leerán los contenidos de este artículo bastante antes de su publicación.) Por ejemplo, mi hija recibió capacitación profesional en contabilidad y ha trabajado en nuestra Oficina Administrativa desde principios de 2000. Ella ha sabido de mis finanzas por años y también tendría que participar en cualquier “encubrimiento”.

Pocos consideran la fuente de las acusaciones: Por ejemplo, ¿cuántos saben que el hombre que reportó sobre mis ingresos y mi casa — mi moderno “Alejandro el calderero”, quién “me ha causado muchos males” (II Tim. 4:14) — se ha declarado públicamente como alguien vehementemente en contra del Sr. Armstrong, así como en defensa total de la conducta del diablo en el Jardín del Edén? ¡Él rechaza rotundamente la validez de la Biblia y ridiculiza abiertamente a Dios!

Pocos saben algo de esto sobre el ex empleado que me atacó. No obstante, miles han leído sus mentiras. Lo mismo con las mentiras de Rod Meredith — y Joe Tkach. Las falsedades absolutas que dijeron — y que alguna vez pensé serían vistas como mentiras obvias — han seguido vigentes a través de los años. Como Pablo con Alejandro, sólo me queda decir, “Que el Señor les pague conforme a sus hechos”.

¿Prácticas de publicidad cuestionables?

Algunos dicen que nuestros métodos de publicidad para los dispersados son “erróneos” y equivalen a “robar ovejas”. Primero, estamos conscientes de nuestra política y práctica, pero no porque esté equivocada. Aunque nuestro presupuesto está enfocado mayormente al mundo, queda una obligación de ADVERTIR al pueblo de Dios del CASTIGO INMINENTE si no ungen sus ojos (Apo. 3:18) — ¡si no se arrepienten y regresan a la Iglesia, a la verdad, al gobierno y a la Obra de Dios!

Entendamos. Nosotros hemos escrito mucha más literatura al mundo para aquéllos que están aprendiendo la verdad por primera vez (más de 5.000 páginas de libros y folletos, además de artículos) que para los grupos dispersados (2.100 páginas de libros) para ayudar a la gente a escapar de la apostasía. Yo nunca me disculparía por nuestra práctica — ¡y lo haría 10 veces más si pudiera! Cuando miro las absolutamente HORRIBLES DOCTRINAS enseñadas por los “líderes” de la IDV, la IDU y la IDDam (también la IDF), es difícil evitar el vómito.

La buena noticia es que la advertencia está teniendo un efecto real.

Mientras que la mayor parte de nuestro crecimiento proviene del mundo, cientos de personas se nos han unido de la IDV (la tasa se está acelerando), cientos más de la Iglesia de Dios Unida y más cientos de la IDF, además de otros grupos más pequeños. Cientos de ex hermanos de la Iglesia de Dios Universal están viniendo con nosotros luego de haberse ido a casa por años. TODOS los líderes de los dispersados están atacando salvajemente al pueblo de Dios con falsas doctrinas que el Sr. Armstrong condenó una y otra vez — y han ido más allá de lo que ocurrió en los llamados “años liberales” a mediados de los 70s. El Sr. Armstrong hubiese desasociado AL MOMENTO a todos los ministros de la IDV y de la Iglesia de Dios Unida antes de que lograran hacer la décima parte de lo que han hecho. La forma en la que él lidió con los liberales de los 1970s, incluyendo desasociar a Rod Meredith en 1979 por división — así como a muchos otros a través de los años — hace esto imposible de malinterpretar.

No se equivoque. Yo haría TODO lo que estuviese en mi poder con la ayuda de Dios para ADVERTIR a las decenas de miles restantes en contra de la completa vileza que sus líderes les han vomitado encima en el nombre de “la verdad” por casi 20 años. Y hablo aquí mucho más que de sus gobiernos malvados. ¡Esto no es más que el principio de una larga lista de falsas doctrinas sobre las cuales el Sr. Armstrong hubiese ADVERTIDO A GRITOS a todos aquéllos que las escuchasen!

Algunos dicen que el Sr. Armstrong no haría lo que yo estoy haciendo. ¡Yo digo que sí lo haría! Si yo pudiera hacerlo, le escribiría a cada miembro en la IDV, en la Iglesia de Dios Unida, en la IDDam, en la IDF y en todos los dispersados y astillas sobre los literalmente cientos de lobos que les están mintiendo (doctrinalmente) desde los púlpitos en el nombre de Herbert W. Armstrong.

Si el lector está en verdad interesado en ver lo que el Sr. Armstrong haría — ¡y lo que HIZO bajo circunstancias menos extremas! Lea el artículo que publiqué en marzo de 2012 “Clama a voz en cuello, no te detengas – ¡Lo que todos olvidaron!” Después escuche el crucial sermón “La ‘Sinagoga de Satanás’ Identificada — ¡y Marcada!” ¡Le reto a que lea el artículo y escuche el sermón! Luego lea en I Juan 2:18-19 en donde el apóstol Juan habló de “muchos anticristos”, pero lo más importante, de dónde vinieron.

Con respecto a la acusación de que “el Sr. Armstrong no intentó ‘reclutar’ a Sardis”, entendamos que esta era estaba espiritualmente muerta. No había muchos allí para advertir. Aunque en una condición débil, muchos en los dispersados están aún (apenas) vivos espiritualmente. Incidentalmente, hay una cita en la que el Sr. Armstrong dice que él envió cartas a todas las personas en Sardis que conocía cuando se fue — alrededor de 300 nombres en una lista. (No tenía Internet para dar alcance a nivel mundial como Google nos ayuda a hacer hoy.)

El Sr. Armstrong fue el “Atalaya de Ezequiel” a las naciones de Israel y Judá cuando sólo la vida FÍSICA estaba/está en juego en la Tribulación y Día del Señor. ¿Cuán importante es en comparación advertir a Israel espiritual cuando la vida ETERNA está en juego? ¿Qué atalaya que se preocupe incluso un poco por las ovejas de Dios no haría todo lo posible en las circunstancias actuales? Todos los sermones públicos y emisiones de los dispersados principales — y he escuchado muchos — son tan anémicos que tendrían que mejorar para ser llamados lamentables. Miles saben esto. No hay un esfuerzo o siquiera pensamiento real trabajando en la Iglesia de Dios Unida, por ejemplo, para advertir a 630 millones de israelitas en 30 naciones y territorios hoy. La IDV casi no está haciendo nada. La IDDam no tiene dinero extra para hacer algo, y nunca lo hará. Pero aquí, junto con anunciar el reino de Dios mundialmente, ¡la urgencia para advertir impulsa a todos en la Iglesia de Dios como lo hace un MOTOR POTENTE en un auto! Tristemente, muchos ex miembros de la Iglesia de Dios Universal ni siquiera pueden recordar una mentalidad motivada. Pero es que ellos no la han visto en acción por 27 años, casi desde el día en que falleció el Sr. Armstrong.

Se podría decir más. Pero sepa usted que no nos disculpamos por nada ¡y en lugar de eso nos lamentamos de no poder hacer más! Pero cuando llegue el momento, ¡LO HAREMOS!!!

La relación de mi primera esposa con el Sr. Armstrong

Algunos detractores dicen que la relación personal de 25 años de mi primera esposa con el Sr. Armstrong fue simplemente el haber “trabajado en algunas comidas en su casa”, o haber sido sólo parte de su “equipo de mecanografía”. Hay mucho que describir aquí; mi esposa estuvo muy cerca tanto del Sr. como la Sra. Armstrong — y mucho antes de que yo entrase en escena. Justo después de que Carl McNair se casara con su hermana mayor en septiembre de 1961, ella inició una relación con los Armstrong empezando en esa Fiesta. (Ella había conocido a los Armstrong en la Fiesta de 1960, el año en que sus hermanas fueron al colegio.)

En 1963, siendo una estudiante de primer año, ella empezó a servir como una de las secretarias del Sr. Armstrong — hasta que los Armstrong la llevaron personalmente en barco (junto con otras dos personas) a Bricketwood en 1965 para permanecer ahí por un año. Al graduarse en 1968 (después de pasar un quinto año de vuelta en Pasadena bajo los “términos” del Sr. Armstrong pues ella había solicitado un segundo año en Inglaterra), se convirtió en una de las dos secretarias personales del Sr. Armstrong por los siguientes tres años hasta que nos casamos en 1971, cuando terminó su segunda temporada como secretaria.

El Sr. Armstrong quería “conocerme” antes de “aprobar” nuestro compromiso. Él estaba muy decepcionado por no poder oficiar nuestra boda — tenía que estar en Filipinas — así que llamó a Shirley de larga distancia para hablar por dos horas después de llegar allá para darle consejería de último minuto el día que me gradué (4 de junio), dos días antes de nuestra boda el 6 de junio.

El Sr. Armstrong más de una vez se aseguró de que yo escuchara la historia de por qué Shirley era especial para él, y cómo mi sociable suegro alemán le había hecho “prometer” en 1963 que cuidaría de que su “última hija” no terminara casada con el “hombre equivocado”. El Sr. Armstrong disfrutaba de mi suegro, el Sr. Peter Ochs, de una forma más que usual. Eso rápidamente se hizo evidente para mí, incluso antes de la boda. Por cierto, el Sr. Armstrong reportó por muchos años que la música y el coro de la Fiesta del Sr. Ochs eran los “mejores en toda la Iglesia”.

Mi relación con el Sr. Armstrong

Mi relación con el Sr. Armstrong no ha sido ajena a acusaciones falsas. Algunos han dicho que yo afirmé ser el “confidente personal” del Sr. Armstrong. Nunca he dicho esto, y de hecho nunca lo fui. Pero mi relación con el Sr. Armstrong fue inusual, y cercana.

Que fuera pastor en el campo fue útil para el Sr. Armstrong. Durante la mayor parte de ese periodo, él estuvo rodeado de administradores en Pasadena que tenían sus propias agendas. Él estuvo de alguna forma aislado durante el periodo que pasó en Tucson. (Un ataque al corazón y un matrimonio le llevaron allí temporalmente.)

Fue a través de conversaciones telefónicas y varias visitas personales que lentamente empecé a darme cuenta que mi relación con el Sr. Armstrong había cambiado. Yo me había convertido en un “consejero” desde la perspectiva del campo. El Sr. Armstrong expresó que apreciaba la franqueza y honestidad, incluso cuando esto significaba no estar de acuerdo respetuosamente (por supuesto, nunca sobre doctrina). Él quería eso, y existió un marcado contraste con la inclinación política egoísta que tan a menudo experimentó en Pasadena. Los consejeros ahí le protegían mayormente o le decían lo que pensaban que quería oír.

¡Estos son los hechos! No he llegado tan lejos en la enseñanza de la verdad sin comprometer para fabricar historias ahora. En tal vez una o dos ocasiones a lo largo de los años el Sr. Armstrong no tomó mi llamada — pero se me ordenó que le llamara nuevamente un poco más tarde. Y lo hice. Él en ninguna ocasión dio por terminada la llamada, y esto quiere decir que nunca dijo que “tenía que irse”. Él me llamó en ciertas ocasiones para leerme cartas a los colaboradores completas, y en por lo menos en otra ocasión para leer un artículo corto que yo había sugerido que escribiese. Él deseaba mi opinión al respecto.

Podría continuar dando detalles de mi relación con el Sr. Armstrong — empezando por cómo él me conocía desde 1967 simplemente porque yo era un nadador popular en el campus. Pero también porque medía 2 metros en un campus pequeño. Mi matrimonio con su secretaria sirvió para solidificar la relación de 1971 en adelante. Luego construí esto en mi mente como parte de un entrenamiento crucial bajo un hombre especial hacia una increíble responsabilidad al final de la era.

Reescribiendo la literatura

Luego viene la acusación de que nuestra literatura es simplemente “copia” de los libros y folletos del Sr. Armstrong. Primero, cualquiera que lea la literatura sabe que NO se trata en lo absoluto de copias — ¡ni siquiera un poco! — ni una sola oración. Y NINGUNO de los libros y folletos son versiones parafraseadas de los del Sr. Armstrong, sino que han sido reescritos completamente, sólo conteniendo las mismas verdades que él enseñó. Reescribí cada uno de los libros y folletos del Sr. Armstrong (excepto El Misterio de los Siglos, el cual consideró que era la tarea de Dios para él como el mensajero de la sexta era de la Iglesia de Dios). Nada es copiado. El por qué tal cosa pudiera estar entre una lista de “cosas negativas” sobre mí — que la verdad de Dios haya sido reescrita de manera tan completa — esta más allá de la comprensión. Nadie más siquiera ha empezado a llevar a cabo una tarea de tan enormes proporciones.

Hay una historia que explica como la literatura fue escrita tan rápidamente. Por casi cinco años, mi esposa y yo llegamos a la oficina a las 8 en punto cada mañana (medios domingos incluidos, habiendo predicado la mayoría de los sábados). Escribíamos la mayor parte del día hasta alrededor de las 8 de la noche (algunas veces más tarde), hasta que los ojos de mi esposa “lloraban” sin control, no por llanto normal, sino porque no podía mirar más la pantalla de la computadora. (Yo tenía que estar muy atento, porque ella no me lo diría, por no desear interrumpir mi pensamiento.)

De hecho, por un periodo de tres años y medio, desde diciembre de 2000 hasta mediados de 2004, ninguno de nosotros nos detuvimos para comer — ¡ni una sola vez! — y la cena la tomábamos ya tarde tres o cuatro veces por semana en un restaurante, ¡con frecuencia hasta las 9 o 9:30 p.m.! (Además, no comimos un solo desayuno o comida o cena juntos — ni una — a la mesa en casa, de 1999 hasta los meses en que ella estaba por morir a mediados de 2007. No teníamos tiempo.) Esa carga de trabajo probablemente mataría a tres hombres que carecieran de la ayuda de Dios que tan obviamente nos dio a nosotros.

Francamente, este pudo ser una gran razón por la que mi esposa no esté aquí ahora. Yo caminaba por la oficina recordando las palabras (nuestro apodo para mí era el “puma enjaulado”) de cada libro nuevo sin nota alguna — NINGUNA, no había tiempo para prepararlas — con sólo una Biblia en mis manos. (Mi esposa debía simplemente sentarse y mecanografiar. Eso era más duro. Yo podía deshacerme del estrés y suprimir mi apetito bebiendo café.) Mi esposa, muchos miembros de nuestro personal — y Dios — saben que esta rutina era real. Mi primera esposa nunca se quejó ni una sola vez — ¡ni una sola vez! — y en ciertas formas podría decirse que ella murió justo en su puesto donde estaba sentada habiendo mecanografiado más de dos millones de palabras (más muchos miles de ediciones individuales). Todos aquéllos que fueron testigos de sus esfuerzos saben que ella no hubiera querido que fuera de otra forma.

Debe ser dicho que nada de esto era particularmente fácil mientras Rod Meredith estaba diciendo tantas mentiras atroces sobre nosotros. Después de todo, él había bautizado a mi esposa en 1963 cuando ella estudiaba el primer año en el Colegio Ambassador.

Cantidad de material sin precedentes

Una comparación útil, no para jactarme sino para aclarar: El trabajo de toda una vida del Sr. Armstrong (libros y folletos) fue de 1,155.000 palabras (usando un software de procesamiento de palabras). ¡Mis libros y folletos totalizan más de 2,900.000 palabras (aproximándose al triple de ese número — sin incluir artículos como éste — y en una fracción del tiempo, con un sinfín de otras funciones inundando mis días)! A propósito, todo esto constituye un gran motivo por el cual tuve que deshacerme tácitamente de mi tienda en 2000.

Tuve que escribir mucho más que el Sr. Armstrong porque había la necesidad de literatura adicional que no fue necesaria durante sus tiempos. Nadie vino a ayudar, así que “me puse en guardia” e hice lo que el Sr. Armstrong hizo — ¡con el PODER infinito de Dios tan obviamente haciendo esto posible! Y esto sucedió mientras que hombres en los dispersados me atacaban una y otra vez por lo que todos ellos colectivamente no harían. Las declaraciones denigrantes sobre mí meramente “copiando el material del Sr. Armstrong” ignoran y minimizan lo que ningún otro ministro de la Iglesia de Dios Universal ni siquiera intentó. Nuestros críticos no tienen ni idea del impresionante tamaño de lo que ofrecemos — ¡logrado con el espíritu de Dios!

Todo lo que debe hacer el lector es visitar nuestros sitios Web y ver todo lo que allí se encuentra, yendo lenta y cuidadosamente, título por título. Pero esto no le revelará la maravillosa calidad de las copias impresas que distribuimos, que algunos afirman que “Ni siquiera existen porque la IDR no es más que un ‘ministerio de Internet’”. Somos mucho, mucho más que eso. Vea la inmensidad de lo que tenemos, y que se convierte en la evidencia clara de que el Espíritu de Dios está trabajando. Los críticos deberían de pensar muy bien antes de atacarme. En realidad me sobre acreditan porque ningún ser humano podría hacer lo que se hizo con sólo poder humano.

Trate de invocar el Espíritu de Dios mientras lee estas palabras, porque el tema aquí no es como un caso en un juicio criminal, sino más bien uno que exige el discernimiento que proviene de ese Espíritu.

Créame, no pienso ni por un minuto que podría cargar el agua del Sr. Armstrong, y probablemente en ningún sentido. Pero habiendo realizado casi 140 emisiones del Mundo por Venir de media hora y alrededor de 250 audios, con cientos de sermones y muchos estudios bíblicos desde mayo de 1999, mi carga de trabajo durante los últimos más de 13 años asustaría a una manada completa de elefantes. Yo sé lo que el Sr. Armstrong quiso decir — ¡como ningún otro ministro vivo hoy! — cuando decía que vivía, respiraba y funcionaba por el poder de Dios.

Oh, vaya que entiendo...

Antes de empezar a reescribir los libros del Sr. Armstrong, llamé a cinco abogados en derechos de autor para ver si podría parafrasear frase por frase. Tres de ellos dijeron: “No hay ningún problema” porque “las ideas no pueden tener derechos de autor”. El cuarto dijo, “Es muy improbable que parafrasear sea un problema”. El último dijo, “Probablemente está bien, pero estamos en los Estados Unidos y cualquiera puede demandar a cualquiera”. Tomé el consejo del último hombre — el más seguro — y reescribí absolutamente todo. Revisé los materiales del Sr. Armstrong en busca de datos en cada nuevo libro o folleto para asegurarme de no haber perdido puntos críticos. (Por cierto, lo que muchos han llamado una historia verdaderamente inspiradora de este proceso puede ser encontrada en el capítulo 16 de mi libro La Obra de Dios — ¡Su Capítulo Final! Lleva el título de “Una historia personal — Reescribiendo la literatura del Sr. Armstrong”.) Mi esposa tuvo la oportunidad de vivir lo suficiente para usar su veloz mecanografía en todos los libros y folletos con excepción de los últimos. La mecanografía veloz no es mi fuerte, así que alguien más después mecanografió en su lugar, al igual que otra persona está escribiendo este artículo ahora.

Doctrina

Algunos dicen que yo enseño doctrinas contrarias al Sr. Armstrong. Eso es pura ficción procedente de personas que saben que lo es. Nuestra mayor fortaleza es que no nos hemos desviado de forma alguna de “retener lo que tenemos” (Apo. 3:11) y de “ser retenedores de la palabra fiel tal como ha sido enseñada” (Tito 1:9). Sabiendo que el Sr. Armstrong fue el Elías profetizado que “restauró todas las cosas” (Mat. 17:11) a la Iglesia, “persistimos en lo que hemos aprendido y nos persuadimos, sabiendo de quién las hemos aprendido” (II Tim. 3:14). Tampoco nos desviamos de la enseñanza del Sr. Armstrong, escrita y predicada una y otra vez, de que la verdad sólo entra a la Iglesia a través de apóstoles, nunca a través de comités u oficios de menor rango (y tengo muchas de sus citas).

Esta postura constituye lo que he llamado los CUATRO GRANDES MUROS de defensa en contra de toda forma de falsa enseñanza al final de la era. A pesar de mi oficio, tampoco estoy permitido a contradecir lo que el Sr. Armstrong enseñó como doctrina. Ciertamente he añadido detalles (casi todo en profecía) — pero eso es completamente diferente a suplantar la verdad establecida con algo más, tan común hoy día.

Más allá de los flagrantes pecados de (1) rebelión en contra de la forma de gobierno de Dios, y (2) la adopción de la perspectiva protestante/apóstata sobre qué ES la iglesia, los principales dispersados han (3) todos rechazado al Sr. Armstrong como el Elías y (4) la gran verdad de que la doctrina sólo entra en la Iglesia a través de apóstoles. Como enormes errores en sí mismas, estas cosas han abierto la caja de pandora de otras ideas falsas. Por ejemplo, y esto no es sino el comienzo de la lista, prácticamente todos los dispersados permiten el matrimonio “fuera de la iglesia” (después de todo, ellos en efecto dicen, “¿Quién sabe dónde inicia y termina la Iglesia de Dios/Cuerpo de Cristo, de todos modos?”). También permiten que las mujeres utilicen cosméticos. Estos grupos casi todos tienen políticas de “puertas abiertas” con respecto a quienes pueden asistir, por lo tanto prácticamente han invitado al mundo a participar y convivir con sus iglesias. La Iglesia de Dios Unida ha eliminado el tercer diezmo, ha insertado a Jesucristo dentro del evangelio del reino de Dios (al igual que la IDV, la IDDam y la IDDuci), ha dejado de advertir a las naciones modernas de Israel, y ha permitido el colapso de todos los estándares de decoro — cabello, vestido, joyas, tatuajes, música, etc. La IDV, la IDDam y la IDDuci también han permitido todos estos cambios. Gran parte de la tercera parte de la Biblia que es profecía también ha sido abandonada, disminuida, torcida o completamente perdida en los dispersados. Estas son sólo unas pocas falsas enseñanzas.

Pero hay más, mucho más que podría hacer que esta lista se extendiese a varias páginas de largo...

¿Cuántos desasociados?

Posiblemente más que cualquier otro tema de rumores sobre mí son las historias sobre un supuesto gran número de personas que he desasociado a lo largo de mi ministerio. Esto ha servido para crear un espantapájaros — un duro y despiadado dictador que está disciplinando constantemente a las personas y expulsándolas de la Iglesia. Si bien TODO esto es ficción absoluta, merece ser comentado.

A través de los años he llegado a entender que era una necesidad crucial (aunque muy rara) desasociar a personas que no pertenecían a la Iglesia de Dios, de acuerdo a Su clara instrucción. Sólo muy pocas veces tuve que hacer esto. Cualquier verdadero ministro sabe que ocasionalmente tiene que remover a las personas de la membresía, ya sea para proteger a la Iglesia o incluso para proteger a la persona de sí misma. Pero, dependiendo de las circunstancias que un pastor herede, por lo general es poco frecuente. Increíblemente, ¡me he convertido en un tema de leyenda por algo que casi nunca he tenido que hacer! Muy, muy raramente tuve que desasociar a alguien. Las personas que no estaban de acuerdo con la Iglesia generalmente se fueron por su propia cuenta. Un ministro sabio y calificado entiende que las personas que no pertenecen — y ahora sabemos que muchos miles nunca tuvieron el Espíritu de Dios en la IDU — pueden ser suavemente guiadas y con un apretón de manos dan vuelta al mundo a donde ciertamente pertenecen. Me di cuenta de esto desde el principio.

No tuve que sacar a muchas personas de la Iglesia. Durante los 1970s, hubo tal vez una media docena en que esto sucedió — y éstos fueron los “años liberales”, cuando miles estaban dejando la Iglesia en todo el mundo. Durante la primera mitad de los 1980s, después de llegar a Búfalo, Nueva York, desasocié a un número incluso menor. Esto sucedió durante un periodo de cuatro años y siete meses. Y ese pastorado estaba en condiciones desastrosas cuando llegué, habiendo sido desasociado el pastor previo por Pasadena sólo tres días antes de que asumiera el cargo. La misma condición se dio con las congregaciones de Rochester y Syracuse, debido a que el pastor dejó la Iglesia (25 de junio de 1977) el día en que dio su último sermón — y el mismo día en que yo llegué. Más de 300 personas habían dejado estas tres congregaciones durante los tres años previos. No obstante en cada caso, por un periodo de más de ocho años, estos pastorados pronto se convirtieron en las congregaciones de más rápido crecimiento en toda la Iglesia, en todo el mundo. La Administración de la Iglesia, más tarde renombrada Servicios Ministeriales, me reportó esto una y otra vez. Incluso recibí visitas de ministros de la sede (por lo menos cuatro, según recuerdo) preguntándome qué estaba haciendo para lograr tal crecimiento. También querían saber cosas como por qué la asistencia a mis estudios bíblicos era rutinariamente el triple o cuádruple del porcentaje de la mayoría de los otros pastorados. Su objetivo era aplicar principios que pudieran usar con el resto del ministerio de la IDU.

Por supuesto, nada de esto se reportó. Esto contrarrestaría los falsos relatos sobre mí.

En la segunda parte de los 1980s, yo no estaba en condiciones de poner a nadie fuera de la Iglesia, pues Joe Tkach me había reducido a Pastor Asociado y enviado a la ciudad de Nueva York. Una vez que volví a ser pastor, desde el 2 de febrero de 1990 hasta el 2 de marzo de 1993 (cuando fui despedido de la IDU), hubo sólo dos personas que tuvieron que ser desasociadas en Akron, Ohio. Dos damas que se fueron con la IDF me dejaron sin otra alternativa. Esta congregación nuevamente se convirtió en la congregación de más rápido crecimiento en los Estados Unidos, incluso mientras el resto de la Iglesia había empezado a declinar en asistencia, con la mayor asistencia a la Fiesta de Tabernáculos habiendo sucedido en 1990 (151,601 asistieron a la Fiesta ese año). Todos sabemos lo que sucedió durante los años siguientes.

Entre marzo de 1993 y mayo de 1999, mientras estaba en la Iglesia de Dios Global, sólo desasocié a dos personas (pudo haber habido una tercera). Las historias contadas por Rod Meredith de lo contrario son completamente falsas. A propósito, una de las dos personas volvió a la Iglesia poco después y me agradeció por haberle puesto fuera. Por supuesto, Rod Meredith se asegura de nunca mencionar que yo personalmente inicié más de 40 congregaciones en la Iglesia de Dios Global.

Hoy día la Iglesia de Dios Restaurada tiene más de 13 años de edad. En ese periodo, no he desasociado ni tan siquiera a una persona en cualquier parte del mundo. Nuestro Departamento de Administración de la Iglesia inició en 2003. Éste y nuestro ministerio en todo el mundo, raramente (sólo un puñado de veces) han tenido que desasociar a alguien en los nueve años siguientes.

Mientras que mis detractores dirán que este reporte es falso, ¡yo afirmo que es VERDAD! Otros en nuestra Sede atestiguarían su veracidad. Aquéllos que piensan que los demás en nuestra oficina conspirarían conmigo para mentir sobre esos asuntos no son el tipo de persona que podría recibir ayuda de este artículo.

Mi primera esposa siempre se maravillaba de que hubiera desasociado a tan pocos — incluso cuando estaba sirviendo en pastorados terriblemente divididos donde casi cualquier cosa imaginable había sido permitida antes de mi llegada — pero que otros ministros pudieron desasociar a mucha más personas que yo sin ser nunca cuestionados al respecto debido a sus relaciones. Ella dijo esto muchas veces.

Yo me di cuenta de que había una “leyenda” creciendo lentamente sobre mi persona que era pura ficción. A lo largo de mi ministerio, tuve que vivir con la realidad de ser acusado por ministros que yo sabía eran de un espíritu diferente — hombres que no eran convertidos. Mi esposa tenía toda la razón. Estos hombres de hecho se salieron con la suya en cosas terribles. Estos acusadores con frecuencia abusaron y descuidaron sus pastorados y luego se salieron con la suya debido a sus contactos en Pasadena. Que ellos me atacaran cuando experimentaron el descenso natural en el crecimiento que trajo como resultado su conducta fue difícil de soportar. Pero los cristianos tienen que soportar esas cosas esperando en Dios.

Al final, la tragedia no es que mi ego o reputación sean lastimados, sino el hecho de que el pueblo de Dios esté siendo alimentado con mentiras y que mi ministerio y la Obra, hoy hayan sido empañados por rumores. Pero aquéllos con el Espíritu de Dios decidirán si lo que acaban de leer es cierto.

A través de las décadas

He aquí una serie de temas adicionales en los cuales los hechos son útiles — cosas que generalmente NO son sabidas sobre mi ministerio, pero que son ciertas.

Durante mi ministerio completo, busqué “pensar fuera del molde”. Este hábito empezó en la infancia simplemente por haber nacido de los padres que provengo. El ejemplo del Sr. Armstrong realzó esta influencia. Era importante para mí relacionar mi pastorado con la Obra de Dios en conjunto. Siempre en mi mente a través de las décadas fue “¿Qué más puedo hacer? ¿Cómo puedo hacer que la Obra entera crezca? — ¿Cómo hacerla más efectiva? ¿Hay algo que me falta que podría hacer una diferencia?” (Una vez que lo entendí, esto se convirtió en la razón por la cual estoy escribiendo este largo artículo.)

Una forma en la que los ministros podían servir directamente en la Obra de Dios era a través de que la Sede invitase a suscriptores de La Pura Verdad a Conferencias bíblicas públicas (CBPs). Empezando a mediados de los 1970s, llevé a cabo más de estas conferencias que casi todos los demás ministros. En el espíritu del párrafo previo, añadí una característica a mis conferencias. Esto involucraba solicitar que la Sede nos enviara una copia de cada pieza de literatura que tenía la Iglesia, junto con 10 de las más grandes e importantes piezas. Al principio Pasadena se negó por el costo, pero posteriormente vio que el método era efectivo — que traía crecimiento. Ellos nunca más dudaron en enviar lo solicitado. Me enteré en algún punto que esto empezó a ser empleado en otras CBPs porque demostró hacer una diferencia.

Posteriormente llevé la idea aún más lejos: Sugerí que la Sede enviase un ministro sénior — un nombre reconocido de La Pura Verdad — a mi área. Mi idea era: Si las Conferencias Bíblicas tenían éxito con sólo un ministro local presente, ¿cuánto más fructífera sería si se contase con la visita de un representante reconocido — un presentador de la emisión del Mundo de Mañana? Pasadena estaba intrigada. (Esta idea produjo más tarde un programa en el que por un corto tiempo varios de estos hombres fueron enviados a grandes ciudades en los EE.UU. para dar conferencias.)

Fue una sorpresa que más ministros no utilizaran esta herramienta (CBPs) más frecuentemente para exponer a los residentes locales a la verdad de Dios. Por supuesto, algunos lo hicieron. Me aseguré de que las CBPs se dieran por todos y cada uno de mis pastorados (cada 12-18 meses), y me aseguré de que la mayor cantidad de hermanos locales estuvieran involucrados de alguna manera en su éxito. A ellos les encantaba jugar un papel, y sirvió para unificar y emocionar a la congregación durante un periodo antes y después de las conferencias. Sólo contarlo me trae gratos recuerdos.

Fui el pastor que desarrolló el Programa de Distribución en Estantes de la Pura Verdad para convertirlo en lo que finalmente llegó a ser. Yo no generé la idea, pero la estructuré cuidadosamente de tal forma que Pasadena pudiese maximizar su efectividad, en caso de que ellos quisieran extender mis ideas a todos los pastorados. Usted no tiene por qué creer mi reporte sobre esto. Cualquiera que cuente con el antiguo Manual de Distribución podrá ver que está basado en los mapas de Búfalo, Nueva York y lo que escribí para que la Sede empleara por todas partes.

De manera similar, vi que Oportunidades para la Juventud Unida (Y.O.U., Youth Opportunities United) — el programa formal de la Iglesia para desarrollar a sus adolescentes — estaba empezando a una edad muy tardía (13 años) para formar sus jóvenes mentes de manera efectiva. Yo tenía tres hijos (de 2, 7 y 9 años) en ese momento (1982), y vi la necesidad de empezar con los niños incluso a los cinco años de edad. Entonces desarrollé un programa local en Búfalo para las edades de 5 a 12. Fue tremendamente exitoso (teníamos un coro de 99 niños, ¡que hicimos caber en el escenario en una ocasión!) e involucraba una variedad de deportes, ideas para acampar y recaudar fondos, más clases bíblicas para enseñar, unificar y unir a los niños. Pasadena se enteró de esto y me pidió que escribiera sobre lo que estaba haciendo. Lo hice — y el resultado fue los Servicios Educativos Juveniles, o Y.E.S. (Youth Educational Services), como llegó a ser conocido. Esta es la razón por la cual la Iglesia de Dios hoy hace tanto por sus jóvenes — ¡más que todos los otros grupos combinados!

Entendamos. No estoy escribiendo estas cosas para obtener crédito, sino más bien para explicar la verdad de mi ministerio.

Escribí artículos para la revista Las Buenas Noticias que no me contaron para un aumento o un bono. Quería servir y ayudar a las personas a lo largo y ancho como pudiera. Otros en el ministerio de campo escribían, pero eran pocos. Llevé a cabo actividades regionales anuales para solteros, así como ciertos torneos deportivos anuales, que siempre involucraban a cientos de personas. La última actividad para solteros que organicé, en 1992, contó con la asistencia de 400 solteros de 38 estados. Recaudamos para la Obra decenas de miles de dólares que pudieron ser enviados a Pasadena, y no sólo durante la vez o las dos veces que Pasadena solicitó que las congregaciones hicieran esto colectivamente. Un seminario de sermoncillos que di en Syracuse en la primavera de 1978 fue desarrollado para volverse un extenso manual que llegó a las manos de Dean Blackwell en Pasadena. Me enteré de que, por los siguientes 15 años, éste fue usado como una herramienta para la preparación de discursos en el Colegio Ambassador (aún con mi firma). Mi hijo me llamó en 1991 para decirme que era el manual para discursos que se iba a estudiar en su clase.

La mayoría de los otros ministros nunca hicieron ninguna de estas cosas, y no digamos en una base regular. Tristemente, todas estas actividades sirvieron para un propósito oculto al que debí enfrentarme: causaron un resentimiento real en los pastores alrededor de mí quienes pensaron que yo estaba “tocando cornetas” o “presumiendo” a Pasadena. Yo les estaba haciendo “quedar mal”. En lugar de copiar las partes que les hubiesen ayudado a servir al pueblo de Dios, ellos escogieron esparcir rumores sobre mí. Son algunos de estos mismos rumores que han cobrado vida y condujeron a este artículo.

Joe Tkach y un par de hombres a su alrededor fueron capaces de nutrir activamente y usar este resentimiento en mi contra para su beneficio. Él literalmente ordenó que cinco pastores que vivían cerca “escribieran sobre mí” a finales de 1985, justo antes de la muerte del Sr. Armstrong. Dos de estos hombres me llamaron casi seis meses después para confesar lo que ellos y otros tres habían hecho y para contarme cómo “no tuvieron opción”. Estos cinco hombres hoy día han dejado completamente el camino de Dios. Uno permaneció en la IDU. Otro se quedó allí y tuvo una crisis nerviosa. Otro se convirtió en un alcohólico. Otro renunció a toda la verdad y se fue a casa... y así sucesivamente.

Y aún así muchos han llegado a creer lo que hombres como éstos, trabajando en concierto con hombres como Joe Tkach en su tiempo, y posteriormente Rod Meredith por las mismas razones, han simplemente inventado. Nuevamente, aquéllos con el Espíritu de Dios decidirán si lo que acaban de leer es cierto.

Frutos de suma importancia

¡Hablemos de los frutos HOY! Nunca deja de entristecerme pensar en cómo otros podrían experimentar lo que nosotros experimentamos diariamente en toda la Iglesia de Dios — y en tantas formas (ciertamente no a la perfección). Paz, felicidad, amor, extraordinaria unidad doctrinal y de propósito, celo, incesante sacrificio, eficiencia y producción — ¡tantos FRUTOS maravillosos! — son casi palpables físicamente en la Iglesia de Dios. (Simplemente nuestra oficina rentada, más de 6.000 metros cuadrados, enteramente remodelada como una obra de amor para los dueños con trabajo voluntario a lo largo de los años, asombraría al lector de la misma manera como ha sucedido con todos los que la ven.) Nada de esto habla de dramáticas sanaciones regulares, demonios siendo expulsados, muchos milagros, puertas abiertas, bendiciones e increíble CRECIMIENTO en todas las categorías (incluyendo más del 20% de crecimiento en promedio en asistencia a la Iglesia — por 13 años consecutivamente — con los últimos cuatro promediando casi un 25%).

Nuestro ingreso en 2011 fue un 102.2% por encima de 2010. El 2012 excederá grandemente al 2011. (Ambos años y varios antes de éstos han transcurrido en medio de una terrible economía.) Nuestro ingreso ha promediado casi un 35% de incremento anualmente por 13 años, muy por encima del robusto 20% de crecimiento en asistencia a la Iglesia. (Un fuerte incremento en colaboradores y donadores ha hecho esta diferencia por mucho tiempo.) Preguntemos: ¿Qué sucederá cuando el efecto completo de la televisión nacional entre en acción? ¿Y cuando nuestro hermoso campus Sede mundial abra en mayo de 2013? Más puertas (algunas ya lo han hecho) parecen estar abriéndose a líderes mundiales. Periódicos por todo el mundo están escribiendo artículos sobre nosotros (revise el Internet), y se nos ha dicho por fuentes que esto apenas comienza. Tendremos más de 110 empleados sólo en la Sede (casi 80 ahora) para el próximo verano — con ministros de tiempo completo por todo el mundo siendo añadidos. ¡Grandes cantidades de literatura de alta calidad en inventario nos permiten dar seguimiento a TODO esto! Mientras que nuestros enemigos predicen que no podremos terminar nuestro proyecto de construcción, ¡ahora ni siquiera estamos usando un banco! Estamos usando completamente efectivo en nuestra primera construcción multimillonaria en dólares. (El tiempo dirá si se continúa de esa forma con otras construcciones programadas que vendrán pronto.)

Durante este mismo periodo, de hecho fuimos capaces de entrar a la televisión nacional, y contratar muchos más ministros y personal. También fuimos capaces de aumentar nuestro presupuesto para literatura 11 veces — ¡¡¡1.000%!!! — al mismo tiempo. Todo esto es evidencia de que DIOS ESTÁ CON NOSOTROS — porque ningún hombre u hombres podrían hacer estas cosas, ya fuese el Sr. Armstrong, yo o cualquier otro.

¡VEA USTED ESTAS COSAS! ¡Ignorarlas tendrá un TERRIBLE PRECIO!

Una ciudad asentada sobre un monte

Si los cristianos individualmente son por sí mismos una “ciudad asentada sobre un monte que no se puede esconder” (Mat. 5:14), como nuestro hermoso campus en desarrollo, hoy la Iglesia y la Obra son realmente la “GRAN ciudad asentada sobre un monte cuyos frutos no se pueden esconder”.

Una Obra poderosa e increíble está en camino en La Iglesia de Dios Restaurada. Esto es porque no rompemos el GRAN PATRÓN establecido por el Sr. Armstrong — ¡nada de ello! Es debido a que Jesucristo realmente es la CABEZA de esta Iglesia. En uno o dos años como máximo, el perfil de la Iglesia de Dios y la verdadera Obra estará más allá de la imaginación. Le quitará a usted el aliento y dejará sonando sus oídos. Las buenas nuevas son que más ministros y miembros están saliendo de TODOS los dispersados para volver a la ÚNICA IGLESIA DE DIOS. ¡Miles se nos unirán, y usted lo verá! Esto significa que nuestro poder, impacto y crecimiento serán afectados aún más a la alza. Esperamos ser la mayor presencia — ¡la voz más audible! — en televisión religiosa en el mundo en algún momento en 2015. Y esto estará respaldado por la mayor cantidad de literatura alguna vez compilada por alguna organización individual sobre la faz de la tierra.

Uno pudiera desear que tan sólo estudiantes del Centro “bíblico” de la Iglesia de Dios Unida, de la “Universidad” de la IDV y del “Colegio” de la IDF pudieran ver la manera Ambassador, — la verdadera, pura, maravillosa MANERA AMBASSADOR — aún funcionando como antes en nuestro Centro Ambassador.

Varios cientos de estudiantes y graduados todos dicen la misma historia. Incluso los Envoys que producimos son de la misma calidad cada año como aquéllos de hace 40 años.

Finalmente, exhorto a cada lector a que vea nuestro film de 63 minutos “Detrás de la Obra”, que presenta una asombrosa panorámica de la Obra de Dios alrededor del mundo. Usted estará contento de haberlo hecho. De hecho, casi no creerá lo que puede que esté a punto de ver. Debe enfrentar el desafío para contrarrestarlo con las producciones verdaderamente tristes y trágicas de otros grupos.

¡Vea si no termina tremendamente inspirado por lo que tal vez haya creído que se había ido para siempre!

No se enfoque en el hombre

El Sr. Armstrong hace mucho tiempo enunció una instrucción al pueblo de Dios sobre lo que debería ser su enfoque — LA VERDAD, no en algún ser humano. Sus palabras parecen más instructivas e importantes hoy:

“¿QUIÉN SOY YO? ¿Un falso profeta o un hombre enviado de Dios con un Mensaje? ¿Sabía usted que le hicieron esa pregunta a Jesucristo?”

“Le preguntaron a Juan el Bautista. ¿Era él el Cristo? ¿Era Elías? No, él respondió — él era meramente una voz en el desierto de confusión religiosa. Pero el hombre no es importante — lo es su Mensaje”.

“¿POR QUÉ la gente siempre parece querer seguir a un HOMBRE? ¿Por qué miran al hombre mismo — y ya sea que se convierten en sus seguidores, o le acusan y le persiguen? ¿Por qué deben ver al HOMBRE en lugar de la VERDAD?”

“Los enemigos de la verdad saben que esta es una característica de la naturaleza humana. Y ellos la utilizan para alejar a la gente de la verdad desacreditando a la persona que la proclama. O bien buscan atraer a la gente a sus caminos falsos exaltando la persona de su líder e induciendo a la gente a seguir a esa persona”.

“¿Quiere usted saber quién soy yo? Bien, quien soy no es importante. Pero si quiere saber la VERDAD al respecto, no les pregunte a aquéllos que están impregnados por el espíritu competitivo de este mundo. Ellos no pueden decirle la verdad acerca de quién soy, o si lo que nosotros proclamamos es cierto, ¡PORQUE NO LO SABEN! Si desea saber sobre mí personalmente — no es importante — pero si aún desea saber, PREGÚNTEME y no a aquellos enemigos desinformados”. [Nota del Autor: Yo hago la misma pregunta a aquéllos que no están seguros acerca de creer los ataques en mi contra.]

“Compruebe como los de Berea hicieron con el Apóstol Pablo — ellos escucharon con mentes abiertas, sin prejuicios, y luego escudriñaron las ESCRITURAS para ver si estas cosas eran así (Hechos 17:11)”.

“Si nosotros proclamamos la VERDAD — si la hacemos clara y entendible, y le guiamos a usted a la verdad la cual usted PRUEBA que es la verdad, entonces CREA ESA VERDAD”.

“Vea los FRUTOS. De los miles, las personas están siendo convertidas — sus vidas cambiadas — están siendo traídos a CRISTO y al Reino de Dios. El mismo EVANGELIO de Cristo está siendo proclamado, COMO UN TESTIMONIO a todo el mundo — en cada continente habitado. El propio rebaño de Dios está SIENDO ALIMENTADO. Aquéllos traídos a Cristo, y que a través de Él son ahora hijos engendrados de DIOS, están encontrando felicidad y gozo ¡que literalmente IRRADIA en sus vidas! Los enfermos están siendo sanados. Líderes futuros en la OBRA DE DIOS están siendo entrenados en los Colegios de Dios. Ésos son los FRUTOS. Esta es la obra en la cual DIOS está trabajando”. [Nota del Autor: Hoy día, este párrafo describe a La Iglesia de Dios Restaurada.]

“Si, incluso como Jesús, la CABEZA viviente de esta OBRA DE DIOS, dijo: ‘Aunque no me creáis a mí, CREED EN LA OBRA [DE DIOS], para que CONOZCÁIS...’”

“Sea un seguidor de JESUCRISTO — yo no estoy buscando seguidores para mí mismo. No sea seguidor de un hombre — ¡sino de CRISTO!”

La Pura Verdad, Personal, septiembre de 1963

A través de nuestro material para los dispersados, nosotros exhortamos a las personas a probar que enseñamos la VERDAD COMPLETA, y que enfatizamos y hacemos la verdadera Obra de Dios — proclamando el reino de Dios al mundo y la advertencia de Ezequiel a las naciones modernas de Israel — ¡exactamente como lo hizo el Sr. Armstrong! El rebaño está siendo alimentado y las vidas están siendo cambiadas. Millones están oyendo del camino de Dios, miles están aprendiendo por qué nacieron — y cientos están siendo bautizados y convertidos cada año.

Dios elige a sus líderes

Una cita final del Sr. Armstrong que es verdaderamente instructiva en este punto para aquéllos que la reciban. Conforme lea, haga a un lado el nombramiento de Joe Tkach pues él quedó fuera de la ecuación para aquéllos que entienden lo que Dios ha hecho en los últimos 27 años. El Sr. Armstrong estaba hablando en la Sede en un Estudio bíblico el 21 de julio de 1978 sobre el templo de Zorobabel y la perspectiva apropiada de cómo Dios le reemplazaría si él muriese:

“¿Están ustedes preocupados acerca de si algo me sucede? Yo no. Yo sé que Dios hará una de dos cosas: Ya sea que Él me mantenga vivo o que levante al hombre apropiado; ése será Su hombre. Y no va a ser alguien por el cual las personas van a votar. “¡Ustedes no tendrán nada que decir al respecto!”

Es tiempo de retroceder y ver el gran cuadro. Piense usted por un momento en los líderes de la IDV, IDU, IDF, IDDam, IDDci, repasando cuidadosamente los nombres en su mente. ¿Cuál de éstos (otros nombres también aplican) ya sea: (1) se nombró a sí mismo desde el principio, o (2) recibió el oficio máximo a través de una votación, antes o después de que alguien más fuera “removido”? Sin considerar por el momento que ninguno de estos hombres han mantenido la verdad.

Mi historia es muy diferente. Después de haber sido despedido, busqué un líder fiel por un periodo de seis años y dos meses. Como al Sr. Armstrong, la posición máxima me fue dada — al menos en parte porque nunca la busqué. Ciertamente mis compañeros o “las personas” no me escogieron. ¡Nadie más estaba dispuesto a enseñar la verdad completa! Mis problemas empezaron cuando no aceptaría ninguna otra cosa.

A la luz de las citas anteriores, como todos los demás, y como cuando Dios escogió al Sr. Armstrong, yo tampoco tuve que “decir nada al respecto” de quién Dios escogió para terminar Su Obra. Al principio yo apoyé a otros hombres después de salir de la Iglesia de Dios Universal. Tuve que aprender que Rod Meredith y Raymond McNair eran ambos falsos. Dios no les había escogido para tomar la batuta. Él había elegido a alguien más.

Escogido — nunca electo

Cuando el líder escogido por Dios no está presente como el líder humano de una organización, y una Junta Directiva o ancianos electos han votado por su líder, ese líder, de hecho, ha aceptado la autoridad de la Mesa sobre él. Sería absolutamente deshonesto que un hombre afirme que Dios lo instaló en el liderazgo, ¡cuando fue una mesa o comité de hombres quienes emitieron su voto colocándole en el oficio sobre la organización que él “dirige”!

El líder de la Iglesia de Dios — el hombre que Dios ha escogido — NUNCA se permitiría a sí mismo ser electo en el oficio por ningún tipo de grupo en primer lugar.

¡El líder de Dios siempre es puesto en el oficio por Cristo después de que ha sido cuidadosamente entrenado y preparado — después de que ha pasado por numerosas dificultades y pruebas, diseñadas para asegurar que él nunca se va a comprometer, ya sea con la verdad o la Obra de Dios, una vez que Dios le ha instalado en el oficio! Este proceso de entrenamiento, de necesidad, asegura que el líder seleccionado por Dios deberá guiar una organización proveniente de los inicios más humildes posibles — donde los frutos de crecimiento, obras y verdad se expanden alrededor y bajo él, después de que inició esencialmente solo — como el Sr. Armstrong lo hizo. Él no puede levantarse de las filas de una organización existente administrada por un comité sin tener que basar su autoridad en la decisión del comité de otorgarle la posición máxima.

¡Lo que los comités de hombres pueden dar, también lo pueden quitar! La Iglesia de Dios Unida ha hecho ambas cosas en numerosas ocasiones.

Cualquier organización grande que inicia con cientos o miles de personas, y que involucra a muchos ministros como la Iglesia de Dios Unida o la IDDam, automáticamente se enfrentaría a la difícil cuestión desde el principio de “¿Quién está a cargo?” Por necesidad, porque comenzó de esta manera, por ejemplo, un grupo podría pensar que no tendría más opción sino votar por un líder. Piense bien en esto, reconociendo que el líder escogido de Dios nunca participaría en tal proceso. Esto sería para él un anatema. Por supuesto, la Iglesia de Dios Unida y la IDDam justifican su rechazo del método de selección de Dios, en lugar del propio, continuamente asegurando que Dios aún no ha hecho clara Su selección para que ellos la sigan. Pregúntese: ¿Quién entre ellos está buscando para ver si Dios ha enviado a otro pastor principal humano hoy en día? Volveremos de manera momentánea a este asunto dos veces más.

Repito: El Gobierno de Dios – Entendiendo los oficios y deberes es de importancia titánica para aquéllos que realmente quieren saber porqué toda la confusión y el caos en la era de Laodicea. El lector debe estudiar y captar los contenidos de ese libro. Es distinto a cualquier cosa que haya leído sobre el tema, y recaptura la verdad del gobierno de Dios que tantos han perdido.

Le imploro que considere cuidadosamente la lógica espiritual de lo que el Sr. Armstrong entendió cuando dejó Sardis con sólo 13 hermanos que se unieron a su familia de seis. Esto representó verdaderamente el más humilde de los comienzos, no obstante, esto inició una organización que eventualmente creció a un tamaño enorme e impactó cada rincón del mundo. Esto fue así debido al poder milagroso de Dios trabajando a través del hombre que Él había escogido y enviado.

¡Tenga cuidado de no pasar por alto el mensaje que Dios envió dentro del ejemplo del Sr. Armstrong!

Un nuevo líder es escogido

Dios ha escogido a un nuevo líder para Su Iglesia. Justo como el Sr. Armstrong no se disculpaba por la decisión de Dios de utilizarle, tampoco yo puedo hacerlo. Tal vez la más grande razón singular (y supongo que puede haber habido varias) por la que Dios me eligió es porque yo nunca busqué este oficio — nunca soñé ni por un segundo que Dios podía tener este puesto en mente para mí. (Si soy acusado de lo contrario, ése es el error de alguien más.)

Con todas mis faltas y debilidades, sólo Dios sabe por qué yo podía ser usado como Su herramienta. Pero una cosa que puedo decir: ni una vez me miré al espejo, en los 28 años previos que serví en el ministerio de Cristo, y dije algo similar a, “¡He aquí, soy la respuesta de Dios!”

Nunca lo hice. Antes de ser despedido de la Iglesia de Dios Global en la primavera de 1999, el hecho de que Dios me había elegido para un propósito especial no se me había ocurrido ni una sola vez. Sólo en ese momento — tres semanas antes de que Dios estableciera La Iglesia de Dios Restaurada — comencé a considerar mi entrenamiento y experiencia notables, y concluí que Dios había estado preparándome por un muy largo tiempo. Y esto sólo vino a mí debido a que ya no pude encontrar a un solo ministro sénior, o siquiera un ministro entrenado, que estuviera reteniendo completamente toda la verdad que yo atesoraba.

Cuando fui finalmente forzado a considerar mis años de preparación y experiencia, una de las cosas que vi fue que yo había sido, en parte, entrenado personalmente por el Sr. Armstrong durante los primeros 15 años de mi ministerio (nuevamente, después de casarme con su secretaria en 1971). Reconocí que yo había sido preparado para poder continuar la Obra como alguna vez él lo hizo. Yo estaba familiarizado con la forma en que pensaba en una serie de formas que serían de gran utilidad para cualquier persona que fuera empujada a lo que tenía que hacerse. Y recordé que él había dicho en repetidas ocasiones que “cruzaría la calle y empezaría de nuevo” si fuera necesario.

Esto significaba que no había excusa para no estar dispuesto a hacer lo mismo. Si bien la cantidad de trabajo necesario para proseguir estaba más allá de lo que yo podía comprender en ese punto, el entrenamiento estaba en vigor de parte del Sr. Armstrong — y de Dios — y sólo me quedaba decidir si continuaría adelante como él lo haría.

Además, Dios me había hecho viajar por un camino extremadamente difícil — lo que usted ha leído ha sido sólo un resumen de ello — como lo hace con sus siervos líderes, en preparación para el tiempo de reunir a todo el resto del pueblo de Dios — aquéllos con Su Espíritu — de vuelta a la Iglesia después de la apostasía. No me designé a mí mismo. Nadie más se unió — ¡y créame que busqué a alguien que no estuviese transigiendo!

Por supuesto, muchos nunca van a aceptar la elección de Dios. Esto es cierto incluso entre los que aún sienten que Dios sólo trabaja a través de un hombre a la vez. Si ellos no “ungen sus ojos” primero, no buscarán — de hecho no podrán — con los criterios correctos en mente. Para entender este proceso, lea mi libro “Unge tus ojos – La advertencia de Cristo a su pueblo”.

Considere otra vez el bien conocido pensamiento del comité electo de doce hombres que dirige a la Iglesia de Dios Unida, aún con el mayor número de personas que “sobrevivieron” a la apostasía. Sus líderes claramente adoptaron un gobierno democrático, en el cual el comité electo luego vota sobre quién debe ser el líder para un “mandato” establecido. Ellos justifican tal confusión atroz — donde la cola mueve al perro — diciendo, nuevamente, “Dios no ha levantado a un solo hombre, como fue con el Sr. Armstrong. ¡Si lo hiciera, lo seguiríamos!” Muchos me han dicho esto en ocasiones sociales por años.

Dios ha elegido a Su líder, pero ellos no lo siguen. ¿Por qué?

Líderes ciegos en los dispersados

Para apreciar su “concepto de iglesia”, eche un vistazo a los últimos años en que los líderes de la Iglesia de Dios Unida y de la IDDam permanecieron en la Iglesia de Dios Universal. Esto incluye el periodo a través de la primavera de 1995 (muchos ministros que se unieron a otros grupos también se fueron al mismo momento o sólo ligeramente antes). Estos líderes comprometieron, apaciguaron, hicieron política y siguieron la corriente, ¡mientras que a la vez estuvieron perfectamente dispuestos a sentarse en la presencia del dios trinitario falso y pagano por dos años y medio que fue introducido a finales de 1992! Los hechos son cosas persistentes. Y los hechos de la historia son que la mayoría de estos hombres aceptaron a este dios falso (TODOS lo toleraron), y sólo después convenientemente reevaluaron su posición en un grado u otro — nunca en público.

Nuevamente, habiendo absorbido docenas de falsas doctrinas e ideas a las cuales se acostumbraron inconscientemente, estos ministros salieron hasta el último momento posible, cuando vieron que la membresía se estaba yendo sin ellos. Se vieron a sí mismos a punto de perder permanentemente sus salarios si no seguían inmediatamente a miles de pagadores de diezmos fuera de la IDU. Pero, no queriendo parecer seguidores — y horrorizados de que muchos que se estaban yendo estaban ya sea uniéndose o contemplando unirse a uno de los dos establecidos, los dispersados más doctrinalmente conservadores de ese tiempo (IDG e IDF) — saltaron rápidamente frente al rebaño que se marchaba, diciendo ser sus líderes.

Sin importar qué tan sinceros pudieran ser estos hombres — entonces o ahora — ¡tienen una larga historia de profunda CEGUERA! Por supuesto, la mayoría de ellos no me seguirán así como yo sigo a Cristo (I Cor. 4:16; 11:1) Desde luego ellos no van a reconocer en dónde y a través de quién Dios está trabajando. Desde luego que no van a renunciar a su poder, autoridad e influencia. Y por supuesto que van a relatar historias sobre mí, como lo hacen muchos otros, para amedrentar a tantos hermanos como sea posible a fin de que se queden inmóviles donde están sentados — porque esto mantiene que los diezmos sigan llegando.

Muchos de estos líderes también disfrutan de una relación relativamente buena con los líderes de las otras organizaciones, porque las creencias y prácticas de los grandes dispersados son generalmente mucho más similares de lo que estos líderes están dispuestos a admitir. Sin embargo, debido a que ninguno de estos líderes está dispuesto a renunciar a su puesto de poder individual, estas organizaciones que pudieran de otra forma estar combinadas permanecen separadas.

Repito: El lector querrá escuchar mi sermón “La ‘Sinagoga de Satanás’ Identificada — ¡y marcada!”

Quienes no estén preparados

Entienda que no estoy tratando de atacar a estos hombres. Lo que está sucediendo detrás del escenario, si usted supiera la verdad, es lo opuesto — y para estos momentos debiera entender que sus ataques sobre mi persona empezaron mucho antes de que yo dejara la IDU. Estoy relatando ciertos eventos para que usted pueda entender cómo prácticamente TODOS los líderes en los dispersados piensan. TODOS comparten una completa ceguera que inhibe su habilidad de ver cuánta VERDAD han perdido — y dónde se encuentra la organización que no ha transigido con nada de la misma.

Nuevamente, Dios entrena exhaustivamente a Sus siervos por un largo periodo de difíciles tareas. Su elección nunca podría ser uno de los “chicos dorados” — “la gente bonita”. Estos son aquéllos quienes generalmente obtuvieron un puesto alto a través de su destreza política y suaves palabras, y rara vez por tomar posiciones difíciles o tomar decisiones difíciles, impopulares — a menos que éstas les ayudarán a escalar.

He conocido a muchos hombres con el don de “pasearse por las salas del poder”, y raramente ofenden a alguno de los integrantes que sienten que ellos deben complacer, si van a conservar el oficio — y continuar avanzando. Tales “líderes” automáticamente atraen a grandes números de seguidores simplemente porque son “marcas reconocidas” — y por que tienen personalidades suaves y cómodas y la habilidad de decirle a la gente lo que quieren oír en lugar de lo que necesitan oír. Estos son muchos de los mismos hombres que fueron (aún son) capaces de acaparar suficientes votos para lograr la posición máxima en la Iglesia de Dios Unida o en la IDDam. Son hombres como Rod Meredith, que pueden cubrir sus propios pecados y falsas enseñanzas por años y salirse con la suya. Eso requiere cierta “habilidad”.

Que Dios le ayude a ver esto.

Pregúntese a sí mismo: ¿Por qué tantas personas buscan un líder para seguir entre aquéllos que estuvieron de acuerdo y se sentaron en silencio con poca o ninguna resistencia por años mientras que los sucesores del Sr. Armstrong masacraban a decenas de miles del pueblo de Dios — sus hermanos? ¿Por qué tantos quieren ser guiados — ¡nuevamente! — por esos débiles que no son líderes? ¿Por qué alguien querría seguir a seguidores, y aun una segunda vez? No obstante, muchos lo hacen. ¿Y por qué alguien querría seguir a un líder como Rod Meredith, que hace tanto tiempo y tan abiertamente — y OBVIAMENTE — se descalificó a sí mismo como un hombre de Dios?

Entendamos lo siguiente: El Sr. Armstrong nunca habría escogido a alguien que Dios usaría como el verdadero sucesor para guiar a Su Iglesia. Si lo hubiera hecho, el propósito de Dios para la apostasía — lo cual era probar que los hermanos en la Iglesia amaban toda Su verdad y camino de vida — habría sido frustrado. El pueblo de Dios tampoco hubiese tenido que enfrentar el segundo paso — y PRUEBA — ahora sobre ellos, de dejar los dispersados en disputa y desacuerdo para regresar a la única Iglesia de Dios.

¡Fije esto firmemente en su pensamiento!

Antes de que Dios pueda usar al hombre que Él ha escogido, todas las tareas, el sufrimiento, el entrenamiento y la experiencia deben estar presentes. Eventualmente Dios daría a conocer Su decisión a todos aquéllos esperando para volver a Su Iglesia. Los líderes cobardes, auto-nombrados, transigentes — ciegos ante esta era, faltos de verdadero entrenamiento para el puesto y que ven al escogido de Dios como un rival — tendrían que denigrar a tal hombre. ¡Tendrían que hacerlo! Su ceguera y la naturaleza general de cómo han conducido su ministerio por años les impide entender mi liderazgo. Después de todo, ¡han probado que nunca entendieron el estilo de liderazgo del Sr. Armstrong!

¡Véalo!

La peor hipocresía

Consideremos una última vez a la Iglesia de Dios Unida, y también a la IDDam, por un mensaje que transmiten — que los comités que les guían creen que Dios no ha levantado a un hombre al cual seguir. Nuevamente, ellos repetidamente dicen que si Él lo hubiese hecho, seguirían a ese hombre — y que si Dios lo hace en el futuro, aún lo seguirán.

Que falsedad — ¡que hipocresía! ¿Quién engaña a quién?

Muchas preguntas surgen — para ellos y para usted: ¿Han buscado a ese hombre? ¿Han examinado los frutos de posibles candidatos en sus mentes? ¿Saben qué buscar? ¿De dónde piensan que este hombre vendrá? Si están eliminando posibilidades — ministros u organizaciones — ¿están haciendo esto sobre el fundamento correcto? ¿Se preocupan por sí mismos, o siquiera piensan en, las doctrinas que este hombre debería estar enseñando — y cuánto tendrían que cambiar para seguirle? ¿Se dan cuenta de que este hombre no podría — y nunca lo haría — comprometer el gobierno de Dios como ellos lo hacen? ¿Hay un plan implementado y que funcione para clausurar la Iglesia de Dios Unida (y la IDDam) para seguirle cuando él llegue? Como si estuviera loco hablo.

Más importante, ¿han buscado la guía de Dios para encontrar a este líder, tal vez orando y ayunando de manera colectiva en su búsqueda? Entonces, ¿han considerado que Dios nunca condonaría su “espera” por un hombre estando bajo formas de gobierno completamente anti-bíblicas? ¿Es que estos hombres realmente piensan que de repente estarán dispuestos a sujetarse a la autoridad de un hombre después de muchos años de seguir el liderazgo por “consenso” — en el cual tuvieron una “voz” y un voto?

Una vez más, ¿a quién quieren engañar con tan abrumadora hipocresía?

¡Ninguna persona seria — que realmente piense esto bien — podría posiblemente creer que el grupo escogido que profesa esto está activamente haciendo ALGUNA de estas cosas! Como los investigadores que buscan una cura para el cáncer, esta banda sabe que si realmente encuentran al hombre que ellos con frecuencia han descrito como “aquel a través de quién Dios está trabajando” estarán sin un empleo. No deje que este comité le engañe en la creencia de que con seguridad puede confiar en ellos para hacerle saber cuando hayan ubicado al “hombre de Dios”. Ellos no están buscando a este hombre. No tienen plan o proceso en lugar para encontrarle — ¡y no están cerca de hacerlo! (Podríamos decir humorísticamente que es sorprendente que no hayan designado a un comité para este propósito ¡pues tienen uno para todo lo demás!) Pero tampoco la mayoría de los ministros en la IDV están buscando al líder de Dios — pues asumen que ya le han encontrado. Que tan terriblemente equivocados están...

Una ceguera voluntaria ha cubierto muchos, muchos ojos. Pero ellos no tienen excusa. Como muchos hoy en día — si estos hombres estuviesen buscando — estarían inclinados a buscar a alguien del cual los hombres hablen bien, aún cuando Cristo dijo, “¡Ay de vosotros, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros!” ¿Usted los seguiría, o a hombres como ellos? ¿Es su “promesa” superficial, falsa y egoísta “para unir fuerzas” lo suficientemente buena para usted?

Asegúrese de que USTED no esté buscando seguir a uno que “juegue el juego”, suba a la cima, y tenga la aprobación de los hombres.

Haga una pausa y considérese a sí mismo. Piénselo bien. Después de atestiguar lo sucedido con los líderes apóstatas, junto con uno o más líderes en los dispersados que comprometieron, incluyendo a Gerald Flurry, que inició el primer dispersado en diciembre de 1989, y quien ha usado al gobierno para brutalizar a su rebaño, a usted se le presenta una decisión personal. El Sr. Armstrong con frecuencia dijo: “Dios siempre trabaja a través de un hombre a la vez”. Por lo tanto usted debe, ya sea: (1) Concluir que el sistema de gobierno dirigido por un hombre estaba equivocado, porque podía producir malos líderes, y apoya que se ponga el poder en las manos de un comité electo para elegir a su líder, o (2) en fe, determina encontrar al hombre que no va a comprometer y a quien Dios ha entrenado y levantado.

No hay otras opciones. Piense cuidadosamente en esto — ¡NO HAY OTRAS OPCIONES!

El gobierno de Dios fue restaurado en la sexta era de Su Iglesia. El Sr. Armstrong enseñó que “el gobierno lo es todo” (sus palabras). Ningún líder apóstata o cualquier otro hombre tienen la autoridad (de Dios o de alguien más) — o el poder — para desterrar o eliminar permanentemente ese gobierno de la Iglesia de Dios. Tampoco pueden alterar su forma. El gobierno de Dios se encuentra donde Su VERDAD RESTAURADA completa es enseñada y practicada, donde el evangelio está siendo predicado a todo el mundo, donde la advertencia especial está siendo emitida para las grandes naciones del Israel moderno, donde el rebaño está siendo apropiadamente alimentado, y donde el líder designado de Cristo se encuentra.

¡Sólo puede haber un lugar así!

¿Una comezón de oír?

¡Nunca lo olvide! Los seres humanos disfrutan oír lo que quieren que se les diga. Muchos a través de todos los dispersados y astillas están más que felices de oír mentiras y engaños, en lugar de la verdad sobre un asunto, especialmente con respecto a la obediencia a Dios. Esto es el porque hay tantos engañadores exitosos operando hoy día. ¡Éstos simplemente les ofrecen a las personas lo que ellos quieren!

Tito advierte en contra de “los que contradicen... habladores de vanidades y engañadores... a los cuales es preciso tapar la boca” porque “enseñan por ganancia deshonesta lo que no conviene” (1:9-11). A fin de cuentas, los líderes falsos siempre tienen un aspecto monetario oculto en sus enseñanzas. II Peter 2:3 muestra que “por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas”. ¡Otra forma de decir esto es que los falsos profetas tratan de engañarle a fin de llevarse su dinero!

¿Cree usted en las advertencias claras? ¿Va a permitir que hagan de usted mercadería?

He aquí dos escrituras notables sobre cómo los seres humanos disfrutan las falsas ideas, en lugar de lo que Dios en realidad dice: “Cosa espantosa y fea es hecha en la tierra; los profetas profetizan mentira, y los sacerdotes dirigían por manos de ellos [no de acuerdo a la Ley de Dios o a Su gobierno]; y mi pueblo así lo quiso. ¿Qué, pues, haréis cuando llegue el fin?” (Jer. 5:30-31). ¡Vuelva a leer la última frase tantas veces como sea necesario hasta que pueda ver en dónde TERMINAN siempre las decisiones equivocadas (Prov. 14:12; 16:25)!

El segundo pasaje: “Porque este pueblo es rebelde, hijos mentirosos, hijos que no quisieron oír la ley del Eterno: que dicen a los videntes: No veáis; y a los profetas: No nos profeticéis lo recto, decidnos cosas halagüeñas, profetizad mentiras” (Isa. 30:9-10).

El antiguo Israel disfrutaba escuchar mentiras de falsos profetas. ¿Por qué? ¡Porque NO QUERÍAN OBEDECER A DIOS! Ellos, como miles hoy, preferían oír a falsos líderes que les decían que no necesitaban cambiar sus caminos. ¡Ellos, como muchos hoy, preferían continuar en pecado y oír de falsos profetas que “no vendría mal sobre ellos” (Jer. 23:17)! El corazón engañoso de Israel no le permitía admitir sus errores y volverse a Dios. Tampoco lo harán miles en los dispersados. Pero usted podría.

Muchos hoy tienen “comezón de oír”. ¿Qué tal usted? Cuando se dicen cosas atroces — sobre cualquier persona — ¿usted simplemente las cree, sencillamente porque “parecen creíbles”, o porque aparentemente existe “evidencia abrumadora” — en otras palabras, porque un grupo de mentirosos se ha unido? Sus mentiras debieran aún así ser obvias por lo que son.

Muchas personas se juntan por propósitos malignos. Algunos lo hacen para cometer crímenes. Otros lo hacen para perpetrar actos terroristas. Y aún otros para cometer inmoralidad sexual en grupo. Otros se organizan para debilitar deliberadamente, a través del uso de “trucos sucios”, a sus rivales políticos. Pensemos. Todos estos grupos practican automáticamente un pecado adicional. Ellos deben encubrir su propósito mediante el engaño. En otras palabras, se ven forzados a añadir mentiras para ocultar sus acciones. Por supuesto, estas clases de personas son del mundo y claramente no convertidos. Tal conducta se espera de ellos.

¿Pero por qué tantos entre el pueblo de Dios, quienes han sido claramente enseñados por Dios a ver las cosas, fallan en reconocer que la misma clase de persona carnal — esta vez entre y en el LIDERAZGO de los dispersados — pueden y estarán dispuestos — ¡y lo hacen! — a unirse con una intención maliciosa, ya sea de manera voluntaria o engañados? Mateo 13:24-30 explica que al diablo le ha sido permitido por Dios sembrar cizañas en su campo. Más debieron haberlo recordado. ¡Usted es responsable ANTE DIOS de reconocer sus acciones en operación!

Hay un “plus” en los ataques por Internet en contra de La Iglesia de Dios Restaurada y de mi persona. Sirven para filtrar a aquéllos que no estén comprometidos a seguir la verdad completa y a hacer la Obra. Si las personas no van a hacer a un lado las tonterías de esas acusaciones, obviamente falsas en contra de la Iglesia de Dios o de mí (pero también las acusaciones inventadas aún hoy en contra del Sr. Armstrong), ellos no pertenecen a la Iglesia de Dios. De esta forma, “...sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a Su propósito son llamados” (Rom. 8:28) se aplica a nosotros. La larga lista de historias ridículas sobre mí tiene un cierto efecto “bueno” de esta forma. Entendemos el proceso de cernir y cribar de Dios.

El Internet: Dios hace mucho tiempo entendió y a propósito permitió la creación de esta asombrosa tecnología. Ésta juega un rol central en su Plan del fin de la era para todos los convertidos. Cada persona debe recorrer un camino de lucha a través de interminables mentiras (asumiendo que ha sido lo suficientemente necio como para buscarlas o escucharlas en primer lugar) como parte del proceso de escoger en dónde residirá — ¡incluyendo si él ultimadamente escogerá empujarse a sí mismo en el LAGO DE FUEGO!

Lo que los “reportes malignos” debieran enseñar

II Tesalonicenses 3:1-2 describe a hombres “perversos y malos” que plagaban al apóstol Pablo. Esto incluye su instrucción de orar por los ministros de Dios para que la “palabra del Señor corra y sea glorificada [del griego: “acelerar”]”. Pablo tenía la autoridad sobre lo que fue inspirado a escribir.

Un principio espiritual, relacionado a cómo se debe recibir los reportes malignos sobre los ministros fieles está contenido en II Corintios 6:3-10. Pablo explicó que los “malos reportes”, mezclados con “buenos reportes”, y acusaciones de ser un “engañador”, cuando él era “verdadero”, ¡en realidad validaron su rol como siervo y apóstol de Dios! Él describió su vida como llena de “angustias” y “tumultos” (del griego: “arrojado de un lado a otro”). Mi ministerio da testimonio de estas cosas. Pero estas cosas son verdaderas de cada líder fiel de Dios.

Tómese el tiempo de leer este pasaje más largo y revelador. Contiene 28 distintas frases que son inseparables de las vidas de los ministros que Dios está usando. Si usted lee esto, nunca verá el rol de estos hombres o su “perfil” de la misma forma otra vez.

¿Ha reconocido usted que las acusaciones de engaño y los malos reportes acerca de un hombre ayudan a identificarle como el siervo de Dios? ¿Le sorprende que a Pablo le consideraran un engañador — que hubiera reportes malos sobre él? Estas acusaciones seguramente apartaron a algunos de ingresar a y permanecer en la Iglesia de Dios y seguir a uno de Sus más grandes siervos (I Cor. 4:16; 11:1). Ellos pueden hacer que usted se aparte de la Iglesia de Dios y de Su Obra hoy.

La prueba de la vida o el ministerio de un hombre nunca descansan exclusivamente en los buenos reportes, honor y aceptación de la sociedad o compañeros. Esto jamás ha sido el caso ni siquiera con los líderes en el mundo, y mucho menos con los que Dios ha levantado. Inevitablemente habrá acusaciones, calumnia, toda clase de reportes malos y vergüenza ejercida sobre los siervos de Dios. Aquéllos guiados por el Espíritu de Dios — el “Espíritu de Verdad” (Juan 14:17; 15:26; 16:13) — verán más allá de las cortinas de humo puestas por el acusador de los hermanos. ¡Recuerde, Pablo también mencionó golpizas públicas, prisión e incluso lapidación, como prueba de su apostolado!

¿Había considerado usted estas cosas — o siquiera sabido de ellas antes?

Todas las explicaciones presentadas en este artículo necesariamente le forzarán a examinar mi oficio. O soy un apóstol verdadero o uno falso. No puedo ser ambos o la mitad de cada uno. Debo ser uno o el otro. Yo lo sé. Usted debe saber cuál soy. Ya sea que me haya sido “dado” (Efe. 4:11-12) por Cristo el ser un apóstol (como Herbert W. Armstrong), o que haya tomado el oficio por mí mismo (como Joseph W. Tkach.) Los frutos y prueba de mi apostolado son inseparables de los frutos y prueba asociados con la Iglesia de Dios. Mucho de la respuesta a la pregunta sobre mi oficio se aborda en varios de mis libros — particularmente El Gobierno de Dios y “Unge Tus Ojos” — pero también en ciertos sermones que discuten mi oficio y que están disponibles en nuestro sitio Web.

Todos los que profesan ser verdaderos seguidores de Cristo: No prestan oído a rumores, chismes y cuentos — “malos reportes”. Rechace estas cosas. Piense por usted mismo. Entienda que hay “inventores de males” (Rom. 1:30) en el mundo — y a través de todos los dispersados. Los cristianos deben soportar que “digan toda clase de mal contra vosotros [de ellos] mintiendo por Mi causa [de Cristo]” (Mat. 5:11-12). Reconozca el gran poder del engaño y las mentiras homicidas, y la determinación del diablo para usar a sus agentes a fin de emplear estas cosas sobre los siervos de Dios (Juan 8:44) para intimidarles — ¡para intimidarle a usted! — alejarle del único lugar en el que Dios está dirigiendo y trabajando. Estos agentes pueden ser falsos apóstoles, falsos profetas, falsos evangelistas o falsos pastores y ancianos.

Aquéllos con el Espíritu de Dios deben ver sus huellas dactilares. Tanto más cuando éstas son tan obvias al estar presentes con nosotros.

Escrituras claras

Si usted está dispuesto a tomar en serio la instrucción de Dios sobre asuntos, entonces revise los siguientes versículos (entre muchos otros), tal vez regularmente. Éstos son la clara instrucción de Dios PARA USTED sobre cuestiones descritas en este artículo.

Lea y piense:

“El hombre perverso cava en busca del mal... en sus labios hay como llama de fuego. El hombre perverso levanta contienda” (Prov. 16:27-28).

“La lengua falsa atormenta al que ha lastimado, y la boca lisonjera hace resbalar” (Prov. 26:28).

“Seis cosas aborrece el Eterno, y aún siete abomina Su alma: los ojos altivos, la lengua mentirosa... el testigo falso que habla mentiras, y el que siembra discordia entre hermanos” (Prov. 6:16-17, 19).

“Los hombres sanguinarios aborrecen al perfecto, mas los rectos buscan su contentamiento” (Prov. 29:10).

“Aunque su odio se cubra con disimulo, su maldad será descubierta en la congregación” (Prov. 26:26).

“El justo aborrece la palabra de mentira” (Prov. 13:5).

“La boca del necio es quebrantamiento para sí, y sus labios son lazo para su alma” (Prov. 18:7).

“El testigo mentiroso perecerá; mas el hombre que oye permanecerá en su dicho” (Prov. 21:28).

“Echa fuera al escarnecedor, y saldrá la contienda, y cesará el pleito y la afrenta” (Prov. 22:10).

“Las palabras del chismoso son como bocados suaves, y penetran hasta las entrañas” (Prov. 26:22).

“El que odia disimula con sus labios, mas en su interior maquina engaño” (26:24).

“Todas las cosas son puras para los puros: mas para los corrompidos e incrédulos nada les es puro; pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas. Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra” (Tito 1:15-16).

“Mas los malos hombres y los engañadores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados” (II Tim. 3:13).

“Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas” (II Tim. 4:3-4). [Nota del Autor: Hemos aprendido que las fábulas doctrinales ¡no son las únicas que la gente escucha hoy!]

“El hacer maldad es como una diversión al insensato; Mas la sabiduría recrea al hombre de entendimiento” (Prov. 10:23). [Nota del Autor: Aquéllos con sabiduría entienden lo que está sucediendo hoy.]

El apóstol Pablo específicamente advirtió de los “peligros entre falsos hermanos” (II Cor. 11:26). Cada uno en el pueblo de Dios debe estar en guardia por esas personas. La Iglesia de Dios Restaurada ha escogido ignorar a los falsos hermanos — ya sea que ataquen desde adentro (unos pocos lo han hecho) y se vayan, o desde afuera (donde muchos hacen esto). Nuestros hermanos saben que no hay que esperar a que un ministro desasocie formalmente a tales personas, cuando esto es inmediatamente obvio ese alguien se ha desasociado a sí mismo del Cuerpo de Cristo. Pablo también advirtió a los “hermanos” que “amonestéis a los andan desordenadamente” (I Tes. 5:14). Busque y lea a quiénes se dirige Rom. 16:17.

Nuestra Sede no intenta mantenerse a la velocidad de la Internet, de los correos electrónicos, los faxes y los teléfonos, cuando estos son usados por mentirosos maliciosos. USTED — personalmente — debe “fortalecerse en el Señor, y en el poder de su fuerza (Efe. 6:10), “firme contra las asechanzas del diablo”, sabiendo que USTED “lucha…contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (vs. 11-12), conforme USTED se “ocupa en vuestra salvación con temor y temblor” (Fil. 2:12).

Recuerde esta “simplicidad en Cristo”.

Una responsabilidad personal

Ha sido dicho: “Una mentira corre por todo el mundo mientras que la verdad está aún atándose las agujetas de los zapatos”. Cuán cierto es esto en la era del Internet. Es la velocidad y poder de las mentiras lo que me hizo finalmente darme cuenta de la necesidad de escribir el tipo de hechos personales e historias que este artículo contiene.

Todos aquéllos de la ÚNICA IGLESIA de Dios tienen una responsabilidad que continuará por algunos años más: “Guarda tu corazón [mente] con toda diligencia; porque de ella salen los problemas de la vida (versión King James). Aparta de ti la perversidad de la boca, y aleja de ti la iniquidad de los labios [esto podría referirse a los labios de otros o a los propios]. Tus ojos miren lo recto, y diríjanse tus párpados hacia lo que tienes adelante. Examina la senda de tus pies y todos tus caminos sean rectos. No te desvíes a la derecha ni a la izquierda; aparta tu pie del mal” (Prov. 4:23-27).

Jesús dijo, “El que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mat. 24:13 y 10:22). Muchos no perseverarán debido al absoluto mal confuso que está ocurriendo a su alrededor (24:12). Ellos no “guardarán su mente con toda diligencia”, y serán engullidos por mentiras obvias.

En este punto es necesario un aviso. Tengo casi 64 años de edad, y he vivido una vida plena. Supongo que puede haber otras historias, y tal vez ya las haya, declaradas en mi contra las cuales no he discutido aquí. Todo en la vida tiene un límite natural y razonable. Las respuestas y explicaciones que este artículo contiene han alcanzado ese límite. Sin embargo, esté usted listo para que los mismos mentirosos que inventaron estas historias desvíen y nieguen la verdad escrita aquí. ¡Espere esto! Puede que fabriquen nuevas mentiras para mantenerle a usted bajo su control. Pero ahora usted puede tomar una decisión informada sobre a quién creerle.

Con cada futura supuesta “revelación” sobre mi carácter, o el de cualquiera de nuestros ministros, algunos caerán en los brazos de Satanás — y se retractarán de reincorporarse a la Iglesia de Dios. Ellos no se detendrán lo suficiente para considerar Apocalipsis 3:11 y su importante advertencia de no permitir que “ninguno tome tu corona”. Tristemente, ¡algunos están casi ansiosos de entregarle su corona a cualquiera que presente una historia!

Si usted piensa que ama el camino de Dios, pero los mentirosos pueden disuadirle de unirse a la Iglesia de Dios Restaurada — el único lugar donde la verdadera Obra de Dios está siendo hecha y Su verdad completa, con Su gobierno, es defendida y enseñada, ¡USTED NO AMA ESTAS COSAS! Se está mintiendo a sí mismo pensando que lo hace. El diablo ha vencido su convicción con mentiras atroces — ¡y obvias! Usted no fue capaz de luchar para atravesar la tormenta de engaño sobre mi liderazgo.

Mi libro ¿Deben ser respondidos los acusadores? aborda el tema de este artículo a detalle. Exhorto a todos aquéllos que se preocupan por la instrucción de Dios sobre este tema a que lo lean. Estudie cada versículo citado cuidadosamente mientras lo lea. Esto es vital para sobrevivir a la era. (El lector interesado puede que desee leer mi Biografía completa de dos tomos, que explica mucho más de todo lo que se cubre en este artículo.)

Manténgase en guardia. Determínese a mantenerse enfocado en la verdad completa y a hacer la verdadera Obra de Dios. ¿Con qué frecuencia el Sr. Armstrong advirtió sobre esto? Satanás ha “detonado” a sus agentes por 2.000 años, enfocado en asesinar el carácter de los líderes de Dios. En el Nuevo Testamento, esto empezó con ataques en contra de Cristo. Como terroristas con explosivos ceñidos a sus cuerpos y ocultos bajo una gabardina, estas “doblemente muertas” “nubes sin agua” (Judas 12) abordan un “autobús” o entran a un “café” (espiritualmente hablando) y se estallan a sí mismos con la esperanza de cometer asesinato en masa en contra de víctimas inocentes las cuales nunca lo vieron venir.

Entienda cuán desesperadamente el diablo quería suprimir el regreso de la verdad completa de Dios en escrito — y su distribución alrededor del mundo — ¡y su necesidad de destruir esta Iglesia a cualquier precio! Mateo 16:18 deja en claro que él no puede tener éxito.

¡Lo que está en juego!

Deje de revolcarse en un océano de falsas enseñanzas — y falsedades continuas. Usted no puede continuar fuera de la Iglesia de Dios, desconectado de Jesucristo la Vid, y conservar el Espíritu de Dios. El Sr. Armstrong enseñó esto una y otra vez y no importa cuánto los mentirosos traten de distorsionar esta clara enseñanza al respecto. Usted debe volver a la única Iglesia de Dios — ESTA Iglesia — La Iglesia de Dios Restaurada — ¡o usted apostatará y perderá el Espíritu Santo!

¿Teme usted a esto? Es evidente que muchos (incluso a su alrededor) ya han perdido el Espíritu de Dios. Muchos otros (incluso a su alrededor) aparentemente nunca lo tuvieron. Otros perderán el Espíritu de Dios si no actúan pronto. ¿Le incluirá esto a usted? Muchos harían bien en leer y releer cuatro palabras cruciales — “No apaguéis al Espíritu” (I Tes. 5:19) — hasta que no puedan pensar en ninguna otra cosa.

¡DESPIERTE a lo que está sucediendo entre el pueblo de Dios! ¡DESPIERTE al odio y engaño que abundan al final de la era (Mat. 24:3, 10-11)! DESPIERTE y reconozca que después de ser ofendidos — luego enojados y amargados — ¡las personas giran y tuercen la verdad de las cosas para lograr sus fines! Prepárese a sacar la cabeza de la arena para ver el “claro peligro actual” que estas cosas representan para USTED — y para SU salvación. ¡Yo debo “clamar a voz en cuello y no detenerme” (Isa. 58:1) sobre estas cosas, porque nadie más lo hace — o lo hará!

Si usted rechaza mis explicaciones en este artículo como falsedades — mentiras — usted está en un dilema. Piense cuidadosamente. Usted ha decidido que los que enseñan atroces mentiras doctrinales están diciendo la verdad sobre mí. Además, ha decidido que un hombre con una larga historia de enseñar la verdad de la Biblia sin comprometer ha escogido ahora decir mentiras sobre sí mismo. Considere la lógica, o más bien la ilógica, de su postura. ¿Está usted seguro de querer hacer esto — con la vida eterna en juego?

Nuevas y enormes herejías se están esparciendo en la Iglesia de Dios Viviente, pero también en cualquier otro lugar. Lea mis exhaustivos artículos “¡La cena de bodas NO es en el cielo!” y “Es la ‘apostasía (II Tes. 2:3) una rebelión mundial futura encabezada por el Hombre de Pecado?”, así como “3 veces un falso evangelio - ¡Cómo los líderes de la IDV engañan a sus miembros!” Pero, nuevamente, para entender el gran proceso que todos aquéllos con el Espíritu de Dios deben emprender, lea “Unge tus ojos – La advertencia de Cristo a su pueblo”.

¡Todo está en juego! ¿Se descalificará a sí mismo de volver a la Iglesia y Obra de Dios, además de perder el Espíritu de Dios — ¡y la salvación misma! — por haber creído, e incluso buscado, MENTIRAS OBVIAS?